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Thursday, July 17th, 2025
the Week of Proper 10 / Ordinary 15
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Bible Commentaries
Comentario de Clarke Comentario Clarke
Declaración de derechos de autor
Derechos de autor=Estos archivos están en dominio público.
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Información bibliográfica
Texto de la bibliografÃa=Clarke, Adam. "Comentario sobre Matthew 27". "El Comentario de Adam Clarke". https://studylight.org/commentaries/spa/acc/matthew-27.html. 1832.
Texto de la bibliografÃa=Clarke, Adam. "Comentario sobre Matthew 27". "El Comentario de Adam Clarke". https://studylight.org/
Whole Bible (28)New Testament (6)Gospels Only (1)Individual Books (3)
VersÃculo 1
CAPITULO XXVII
Por la mañana, Cristo es atado y entregado a Poncio
Pilatos , 1, 2.
Judas, al ver a su Maestro condenado, se arrepiente, reconoce su
transgresión a los principales sacerdotes, atestigua la inocencia de Cristo,
tira el dinero, se ahorca , 3-5.
Compran el campo del alfarero con el dinero , 6-10.
Cristo, interrogado por Pilato, se niega a contestar , 11-14.
Pilato, mientras preguntaba a los judÃos si tendrÃan
Jesús o Barrabás liberado, recibe un mensaje de su esposa para
no tener nada que ver en este malvado negocio , 15-19.
La multitud, influenciada por los principales sacerdotes y los ancianos,
deseo que se suelte a Barrabás y que se crucifique a Jesús, 20-23.
Pilato da testimonio de su inocencia, y la gente se hace
y su posteridad responsable de su sangre , 24, 25.
Barrabás es liberado y Cristo es azotado , 26.
Los soldados lo desnudan, lo visten con una túnica escarlata, corona
él con espinas, burlarse e insultarlo de diversas maneras , 27-31.
Simón obligado a llevar su cruz , 32.
Lo llevan al Gólgota, le dan vinagre mezclado con hiel
beber, crucificarlo y echar suertes sobre su ropa , 33-36.
Su acusación , 37.
Dos ladrones son crucificados con él , 38.
Es burlado e insultado mientras está colgado de la cruz , 39-44.
La terrible oscuridad , 45.
Jesús invoca a Dios, se le ofrece vinagre para beber, 46-50.
Prodigios que acompañaron y siguieron a su muerte , 51-53.
Es reconocido por el centurión , 54.
Varias mujeres contemplan la crucifixión , 55, 56.
José de Arimatea suplica el cuerpo de Pilato y lo deposita
en su propia tumba nueva , 57-60.
Las mujeres miran el sepulcro , 61.
Los judÃos consultan con Pilato cómo pueden prevenir la
resurrección de Cristo , 62-64.
Les otorga una guardia para el sepulcro y sellan la
piedra que tapó la boca de la tumba donde fue puesto, 65, 66.
NOTAS SOBRE CHAP. XXVII.
Verso Mateo 27:1. Cuando llegó la mañana...  Tan pronto como amaneció - consultó contra Jesús . HabÃan comenzado este consejo la noche anterior, ver Mateo 26:59.
Pero como era contrario a todas las formas de la ley proceder contra la vida de una persona durante la noche, parece que se separaron durante unas horas, y luego, al amanecer, se reunieron de nuevo, pretendiendo llevar a cabo el negocio de acuerdo con las formas de la ley.
Para darle muerte... Ya habÃan determinado su muerte, y pronunciado la sentencia de muerte sobre él; Mateo 26:66. Y ahora se reúnen con el pretexto de reconsiderar las pruebas y deliberar sobre ellas para dar la mayor apariencia de justicia a su conducta. QuerÃan hacer parecer que "se habÃan tomado mucho tiempo para considerarlo, y, desde la más completa convicción, por las pruebas más satisfactorias y concluyentes, ahora lo habÃan entregado en manos de los romanos, para enfrentar esa muerte a que le habÃan adjudicado ".
VersÃculo 2
Verso Mateo 27:2. Ellos - lo entregaron a Poncio Pilato...  El SanedrÃn tenÃa en sus manos el poder de la vida y de la muerte en todo lo que se referÃa a la religión; pero como no tenÃan pruebas para condenar a muerte a Cristo a causa de la falsa doctrina, quisieron dar un respaldo a su conducta recurriendo al poder civil, y por ello lo entregaron a Pilato como alguien que aspiraba a las dignidades reales, y a quien debÃa dar muerte, si profesaba ser amigo del César. Poncio Pilato gobernó Judea diez años bajo el emperador Tiberio; pero, habiendo ejercido grandes crueldades contra los samaritanos, éstos se quejaron de él ante el emperador, a consecuencia de lo cual fue depuesto y enviado al exilio a Viena, en el Delfinado, donde se suicidó dos años después.
VersÃculo 3
Verso Mateo 27:3. Judas - cuando vio que estaba condenado, se arrepintió...  Hay mucho de la sabidurÃa y la bondad de Dios en esta parte de la conducta de Judas. Si nuestro Señor hubiera sido condenado a muerte por la evidencia de uno de sus propios discÃpulos, habrÃa proporcionado a los infieles un fuerte argumento contra Cristo y la religión cristiana. "Uno de sus propios discÃpulos, conociendo toda la farsa, la declaró a los gobernantes judÃos, a consecuencia de lo cual fue condenado a muerte como impostor y engañador". Pero el traidor, picado por el remordimiento, vino y reconoció su crimen, y declaró solemnemente la inocencia de su Maestro, tiró el dinero que le dieron para inducirle a hacer este acto villano; y, para establecer la evidencia que ahora daba contra ellos y contra sà mismo, en nombre de la inocencia de Cristo, se ahorcó, o murió por excesiva pena y contrición. AsÃ, el carácter de Cristo fue rescatado de todo reproche; la infidelidad fue privada del poder de gritar "¡impostura!" y los gobernantes judÃos fueron abrumados con la infamia eterna. Si alguna vez se dijera: "Uno de los que mejor le conocÃa le entregó como impostor", a esto se puede responder inmediatamente: "La misma persona, golpeada por el remordimiento, vino y declaró su propia culpa y la inocencia de Cristo; acusó y condenó a los gobernantes judÃos, en el consejo abierto, de haberle contratado para hacer esta acción inicua, les devolvió el soborno que le habÃan dado, y luego se ahorcó por la angustia y la desesperación, concluyendo que su iniquidad en este negocio era demasiado grande para ser perdonada". " Que el que quiera, después de esta plena evidencia de la inocencia de Cristo, continúe con la objeción, y grite impostura, tenga cuidado de no ir y hacer lo mismo. Caifás, Pilatos y Judas ya lo han hecho, y he conocido a varios que han llamado a Cristo impostor, que se han degollado, fusilado, ahogado o ahorcado. Dios es un Dios celoso, y resiente mucho todo lo que se hace y se dice contra esa verdad eterna que vino al hombre por medio de Jesucristo, por el EspÃritu Santo. De hecho, hay una clase de deÃstas, es decir, aquellos que son viciosos en sus vidas, y virulentos en su oposición al cristianismo, que por lo general tienen un final prematuro.
VersÃculo 4
Verso Mateo 27:4. Sangre inocente... αιμα αθÏον, un hebraÃsmo, para un inocente. Pero en lugar de αθÏον, inocente, dos MSS antiguos, el sirÃaco, la Vulgata, el sahÃdico, el armenio y toda la Itala; OrÃgenes, Cipriano, Lucifer, Ambrosio, León, leen δικαιον, justo o recto.
¿Qué es eso para nosotros? ¿Qué es? - Mucho. DeberÃais ir inmediatamente a revocar la sentencia que habéis pronunciado, y liberar al inocente. Pero esto hubiera sido justicia, y eso hubiera sido un delito en su tribunal.
VersÃculo 5
Verso Mateo 27:5. En el templo...Â Â Î½Î±Î¿Ï significa, propiamente, el templo mismo, en el que no se permitÃa entrar a nadie más que a los sacerdotes; por lo tanto, εν ÏÏ Î½Î±Ï debe significar, cerca del templo, junto a la puerta del templo, donde estaban las cajas para recibir las ofrendas voluntarias del pueblo, para el sostenimiento y las reparaciones del edificio sagrado. Véase esto ampliamente demostrado por Kypke.
Se ahorcó...  O fue estrangulado - αÏηγξαÏο. Algunos crÃticos eminentes creen que sólo fue asfixiado por una pena excesiva, y por ello piensan que el relato que se da aquà concuerda con el de Hechos 1:18. El Sr. Wakefield apoya este significado de la palabra con gran aprendizaje e ingenio. Yo tengo mis dudas: el antiguo método para conciliar los dos relatos me parece bastante plausible: fue y se estranguló, y al romperse la cuerda, cayó, y por la violencia de la caÃda su cuerpo se reventó, y sus intestinos salieron a borbotones. He creÃdo oportuno, en un asunto de tal dificultad, utilizar la palabra estrangulado, por poseer un significado intermedio entre la asfixia o sofocación por pena excesiva, y el ahorcamiento, como acto de suicidio. Mateo 10:4. El Dr. Lightfoot opina que el diablo lo levantó en el aire, lo estranguló y lo arrojó al suelo con violencia, de modo que su cuerpo se reventó y sus tripas se derramaron. Esta era una antigua tradición.
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VersÃculo 6
Verso Mateo 27:6. El tesoro... κοÏβαναν - el lugar donde el pueblo traÃa sus ofrendas voluntarias para el servicio del templo, llamado asà del hebreo קר×× korban, OFRENDA, de ×§×¨× karab, se acercó, porque la persona que traÃa la ofrenda se acercaba a ese lugar donde Dios manifestaba su gloria entre los querubines, sobre el propiciatorio en el lugar santÃsimo. De esta idea se toma la frase acercarse a Dios, que se utiliza con tanta frecuencia en los escritos sagrados.
Porque es el precio de la sangre... "¡Qué hipócritas, como uno exclama justamente, al condenar a muerte a un inocente, y romper las leyes eternas de la justicia y la misericordia sin escrúpulos, y ser, al mismo tiempo, tan amables en su atención a una dirección ceremonial de la ley de Moisés! Asà es que el demonio suele engañar a muchos, incluso entre los sacerdotes, con una falsa y supersticiosa ternura o conciencia en las cosas indiferentes, mientras que la calumnia, la envidia, la opresión de los inocentes y la conformidad con el mundo no les dan ningún tipo de problema ni perturbación." Ver Quesnel.
VersÃculo 7
Verso Mateo 27:7. Enterrar a los estrangeros en... ÏÎ¿Î¹Ï Î¾ÎµÎ½Î¿Î¹Ï, los forasteros, significando probablemente, como conjeturan algunos eruditos, los forasteros judÃos que podrÃan haber venido a Jerusalén, ya sea para adorar, o en algún otro negocio, y murieron allà durante su estancia. Vean aquà que el mismo dinero por el que se vendió el bendito Jesús se pone al servicio del propósito de la misericordia y la bondad. Los cuerpos de los extranjeros tienen un lugar de descanso en el campo comprado por el precio en que se valoró su vida, y las almas de los extranjeros y forasteros tienen un lugar de descanso y refugio en su sangre, que fue derramada como precio de rescate para la salvación del mundo entero.
VersÃculo 8
Verso Mateo 27:8. El campo de sangre...  En vano intentan los malvados ocultarse; Dios los hace instrumentos para descubrir su propia maldad. Judas, al devolver el dinero, y los sacerdotes, al colocarlo, se levantan un monumento eterno: el uno de su traición, los otros de su perfidia, y ambos de la inocencia de Jesucristo. Mientras la polÃtica judÃa continuara, podrÃa decirse: "Este es el campo que se compró al alfarero con el dinero que Judas obtuvo de los sumos sacerdotes por traicionar a su Maestro; el cual, con profunda compunción de espÃritu, les devolvió, y ellos compraron este terreno para un lugar de sepultura para los extranjeros: pues como era el precio de la sangre de un inocente, no les pareció oportuno dejarlo reposar en el tesoro del templo donde lo habÃa arrojado el traidor, que después, desesperado, fue a ahorcarse. " ¡Qué prueba permanente debe haber sido esto de la inocencia de Cristo, y de su perfidia!
VersÃculo 9
Verso Mateo 27:9. JeremÃas el profeta...  Las palabras citadas aquà no se encuentran en el Profeta JeremÃas , sino en ZacarÃas 11:13. Pero San Jerónimo dice que un hebreo de la secta de los nazarenos le mostró esta profecÃa en una copia apócrifa hebrea de JeremÃas; pero probablemente fueron insertados allà solo para aprobar la cita aquÃ.
Uno de Colbert, un MS. del siglo XI, tiene ζαξαÏÎ¹Î¿Ï , ZacarÃas ; también lo tiene el sirÃaco posterior en el margen, y una copia del árabe citado por Bengel . En un MS muy elegante y correcto. de la Vulgata, en mi posesión, escrita en el siglo XIV, Zachariam está en el margen, y Jeremiam en el texto, pero el primero está escrito por una mano posterior. Jeremiah falta en dos MSS., el sirÃaco , más tarde Persic , dos de las Itala , y en algunas otras copias latinas. Es muy probable que la lectura original fuera δια Ïοι ÏÏοÏηÏÎ¿Ï , y no se menciona el nombre de ningún profeta. Esto es más probable, ya que Mateo a menudo omite el nombre del profeta en sus citas. Ver Mateo 1:22; Mateo 2:5; Mateo 2:15; Mateo 13:35; Mateo 21:4. Bengel aprueba la omisión.
Era una antigua costumbre entre los judÃos, dice el Dr. Lightfoot, dividir el Antiguo Testamento en tres partes: el primer comienzo con la ley se llamaba LA LEY; el segundo comienzo con los Salmos se llamó LOS SALMOS; el tercer comienzo con el profeta en cuestión se llamó JEREMÃAS: asÃ, entonces, los escritos de ZacarÃas y los otros profetas se incluyeron en esa división que comenzó con JeremÃas , todas las citas de él irÃan bajo el nombre de este profeta. Si se admite esto, se resuelve la dificultad de inmediato. El Dr. Lightfoot cita Baba Bathra , y el prefacio del rabino David Kimchi al profeta JeremÃas, como sus autoridades; e insiste en que la palabra JeremÃas es perfectamente correcta al situarse a la cabeza de esa división de la que citó el evangelista, y que dio su denominación a todos los demás. Pero Jeremiah es la lectura en varios MSS. del copto. Está en uno de los Diccionarios coptos en el Museo Británico, y en un manuscrito copto. de Jeremiah , en la biblioteca de St. Germain . Asà me informó el reverendo Henry Tattam, rector de St Cuthbert's, Bedford.
VersÃculo 11
Verso Mateo 27:11. Ante el gobernador...  Mi antigua EM. La Biblia inglesa traduce ηγημÏν Meyr cheef justyse, Presedent .
Eres tú el rey de los judÃos? Sin duda, los judÃos lo habÃan entregado a Pilato como alguien que se alzaba contra la autoridad imperial y asumÃa el cargo regio. Ver en Mateo 27:2.
VersÃculo 12
Verso Mateo 27:12. No respondió nada... No fue necesaria una respuesta a tales acusaciones: se refutaron lo suficiente.
VersÃculo 14
Verso Mateo 27:14. Maravillado en gran medida... El silencio ante la calumnia manifiesta la mayor grandeza. Los jefes de los sacerdotes no lo admiraron porque los confundió; pero Pilato, que no tenÃa ningún interés que servir con ello, se sintió profundamente afectado. Este mismo silencio fue predicho. IsaÃas 53:7.
VersÃculo 15
Verso Mateo 27:15.  El gobernador solÃa liberar... No se sabe de dónde se originó esta costumbre entre los judÃos, probablemente fue introducida por los mismos romanos o por Pilato, simplemente para obligar a los judÃos, mostrándoles esta muestra pública de respeto; pero si se originó con él, debe haber tenido la autoridad de Augusto, porque las leyes romanas nunca dieron tal poder discrecional a ningún gobernador.
VersÃculo 16
Verso Mateo 27:16. Un prisionero notable - Barrabás... Esta persona habÃa levantado, poco tiempo antes, una insurrección en Jerusalén, en la que aparece, según Marco 15:7, algunas vidas se perdieron. En algunos MSS. y en las Hieros. armenias y sirÃacas, este hombre lleva el apellido de Jesús. El profesor Birch ha descubierto esta lectura en un MS. del Vaticano, escrito en el año 949, y numerado 354, en el que hay una nota marginal que se ha atribuido a Anastasio, obispo de AntioquÃa, y a Crisóstomo, que afirma que en los MSS. más antiguos el pasaje era el siguiente: - Τινα θελεÏε αÏο ÏÏν Î´Ï Ï Î±ÏÎ¿Î»Ï ÏÏ Ï Î¼Î¹Î½, ÎÎ Ïον βαÏαβαν, η ÎÎ Ïον λεγομενον ΧÎ: ¿A cuál de los dos queréis que os suelte, a Jesús Barrabás o a Jesús que se llama Cristo? Como Jesús, o Josué, era un nombre muy común entre los judÃos, y como el nombre del padre se unÃa a menudo al del hijo, como Simón Barjonah, Simón, hijo de Jonás; asà es probable que fuera el caso aquÃ, Jesús Barabba, Jesús, hijo de Abba, o Abbiah. Si este nombre se escribió originalmente como el anterior, lo que me inclino a creer, la omisión general de JESÃS en los manuscritos puede explicarse por el exceso de escrupulosidad de los copistas cristianos, que no querÃan que un asesino fuera honrado en el mismo versÃculo con el nombre del Redentor del mundo. Véase Birch en New Test.
VersÃculo 18
Verso Mateo 27:18. Por envidia... δια Ïθονον, por malicia . Luego, como juez Ãntegro, era asunto suyo el haber dispersado a esta turba y haber soltado a Jesús de inmediato.
Viendo que la malicia es capaz de dar muerte incluso al mismo Cristo, qué cuidado debemos tener para no dejar que la más mÃnima chispa se encienda en nuestro pecho. Recordemos que la malicia a menudo se origina en envidia como lo hace en enfado .
VersÃculo 19
Verso Mateo 27:19. He sufrido muchas cosas - en un sueño...  No hay duda de que Dios se habÃa aparecido a esta mujer, testificando la inocencia de Cristo, y mostrando los males que deberÃan perseguir a Pilato si esta sangre inocente fuera derramada por su autoridad.Consulte Mateo 27:2.
VersÃculo 20
Verso Mateo 27:20. Pregúntale a Barrabás... Que habÃa levantado una insurrección y cometido un asesinato - y para destruir a Jesús, cuya voz nunca se oyó en sus calles, y que, durante el espacio de tres años y medio, habÃa ido incansablemente, de pueblo en pueblo, instruyendo a los ignorantes, curando a los enfermos y resucitando a los muertos.
VersÃculo 21
Verso Mateo 27:21. Dijeron, Barrabás... ¡Qué multitud tan inconstante! Un poco antes lo aclamaban como Hijo de David y lo reconocÃan como un don de Dios; ahora prefieren a un asesino. Pero esto parece que lo hicieron por instigación de los jefes de los sacerdotes. Vemos aquà cuán peligrosos son los sacerdotes malvados en la Iglesia de Cristo; cuando los pastores son corruptos, son capaces de inducir a su rebaño a preferir a Barrabás en lugar de Jesús, el mundo en lugar de Dios, y los placeres del sentido en lugar de la salvación de sus almas. El invidioso epÃteto que cierto estadista dio al pueblo en general era, en su máxima expresión, aplicable a estos judÃos: eran una MULTIPLACIDAD SUECA.
VersÃculo 22
Verso Mateo 27:22. ¿Qué haré entonces con Jesús?  Demostrando, por la presente, que era su deseo soltarlo.
VersÃculo 23
Verso Mateo 27:23. ¿Qué mal ha hecho?  Pilato vio claramente que no se le imputaba nada por lo cual, de acuerdo con las leyes romanas, pudiera condenarlo.
Pero gritaron aún más...  ¡Qué extraña furia e injusticia! No pudieron contestar la pregunta de Pilato, ¿Qué mal ha hecho ? No habÃa hecho nada y ellos sabÃan que no habÃa hecho nada; pero están determinados a su muerte.
VersÃculo 24
Verso Mateo 27:24. Pilato - tomó agua y se lavó las manos...  Significando asà su inocencia. Entre los hebreos, griegos y latinos era costumbre lavarse las manos en señal de inocencia y demostrar que eran puras de cualquier culpa imputada. En caso de un asesinato no descubierto, los ancianos de la ciudad más cercana al lugar donde se encontró el cadáver estaban obligados por la ley, Deuteronomio 21:1, lavar sus manos sobre la vÃctima que se ofreció para expiar el crimen, y asà hacer pública la protesta de su propia inocencia. David dice: Me lavaré las manos en inocencia, asà que rodearé tu altar , Salmo 26:6. Como Pilato sabÃa que Cristo era inocente, deberÃa haber evitado su muerte: tenÃa la fuerza armada a sus órdenes y deberÃa haber dispersado a esta infame turba. Si hubiera sido acusado de tolerar a una persona sediciosa, podrÃa haberse aclarado fácilmente si el asunto hubiera sido llevado ante el emperador. Ãl , por lo tanto, era imperdonable.
VersÃculo 25
Verso Mateo 27:25. Su sangre sea sobre nosotros y nuestros hijos... Si este hombre es inocente , y lo matamos como culpable , ¡que el castigo debido a tal crimen sea sobre nosotros y sobre nuestros hijos después de nosotros! ¡Qué espantosa imprecación! ¡Y cuán literalmente fue cumplida! Las notas sobre el cap. Mateo 24, mostrará cómo fueron vÃctimas de su propia imprecación, siendo visitados por una serie de calamidades sin precedentes en la historia del mundo. Fueron visitados con el mismo tipo de castigo; porque los romanos los crucificaron en tal número cuando Jerusalén fue tomada, que se encontró una deficiencia de cruces para los condenados y de lugares para las cruces. Sus hijos o descendientes han tenido la misma maldición sobre ellos , y continúan hasta el dÃa de hoy como prueba de la inocencia de Cristo, la verdad de su religión y de la justicia de Dios.
VersÃculo 26
Verso Mateo 27:26. Jesús azotado... Se permite que esto haya sido un castigo muy severo entre los romanos, siendo la carne generalmente cortada por los látigos utilizados para este propósito: asà el poeta: -
&mdash&mdash Horribili SECTERE flagello . "Ser cortado por el látigo horrible." - HOR. Se sentó. I. 3. 119.
Y a veces parece que fueron azotados hasta la muerte . Véase el mismo poeta, Sat. I. 2. 41.
&mdash&mdash Ille FLAGELLIS
AD MORTEM caesus .&mdash&mdash
Consulte también HORAT. Epod. sobredosis. iv. v. Mateo 27:11.
Se ha pensado que Pilato podrÃa haber ahorrado esta crueldad adicional de la flagelación; pero parece que era una costumbre común azotar a los criminales que iban a ser crucificados, (véase Josefo De Bello, lib. ii. c. 25,) y no se debe permitir la indulgencia en el caso de Cristo; debe soportar toda la miseria en toda regla.
Lo entregaron para ser crucificado... Tacitos, el historiador romano, menciona la muerte de Cristo en términos muy notables:-
Nero - quaesitissimis poenis is affecit, quos - vulgus CHRISTIANOS appellabat. Auctor nominis ejus CHRISTUS, qui Tiberio imperitante, per Procuratorem Pontium Pilatum supplicio affectus erat". -
Nerón sometió a los que comúnmente se llamaban cristianos a las más exquisitas torturas. El autor de este nombre era CRISTO, que fue castigado capitalmente en el reinado de TIBERIO, por PONTIUS PILATE el PROCURADOR".
VersÃculo 27
Verso Mateo 27:27. La sala común... O, pretorium. Llamado asà por el pretor, un magistrado principal entre los romanos, cuya tarea era administrar justicia en ausencia del cónsul. Este lugar se denomina en inglés el tribunal o sala común.
VersÃculo 28
Verso Mateo 27:28. Lo desnudó...  Se quitó el manto, o prenda superior .
Una túnica escarlata...  O, según Marcos y Juan, una túnica púrpura , como la llevaban emperadores y reyes.
VersÃculo 29
Verso 29. Una corona de espinas... Â
Una corona de espinas... ÏÏεÏανον εξ ακανθÏν. No parece que esta corona pretendiera ser un instrumento de castigo o tortura para su cabeza, sino más bien para ridiculizarlo; por lo que también le pusieron una caña en la mano, a modo de cetro, y doblaron las rodillas, fingiendo rendirle homenaje. La corona no era probablemente de espinas, en nuestro sentido de la palabra: hay hombres eminentemente eruditos que piensan que la corona estaba formada por la hierba acanto; y el obispo Pearce y Michaelis son de esta opinión. Marcos, en Marco 15:17, y Juan, Juan 19:5,, la denominan ÏÏεÏανον ακανθινον, que bien puede traducirse como corona o corona de acanto, formada por las ramas de la hierba acanto, o pie de oso. Esta, sin embargo, es una planta espinosa, aunque nada parecido a las espinas, en el sentido común de esa palabra. Muchos cristianos se han extraviado al magnificar los sufrimientos de Cristo a partir de esta circunstancia; y los pintores, los peores de todos los comentaristas, representan frecuentemente a Cristo con una corona de largas espinas, que uno de pie le está clavando en la cabeza con un palo. Estas representaciones engendran ideas tan falsas como absurdas.
Hay un pasaje extraÃdo de Filón por el Dr. Lardner, que arroja mucha luz sobre estas indignidades ofrecidas a nuestro bendito Señor.
"CalÃgula, el sucesor de Tiberio, dio a Agripa la tetrarquÃa de su tÃo Filipo, con el derecho de llevar una diadema o corona. Cuando llegó a AlejandrÃa, de camino a su tetrarcado, los habitantes de ese lugar, llenos de envidia ante la idea de que un judÃo tuviera el tÃtulo de rey, mostraron su indignación de la siguiente manera. Llevaron al teatro a un tal Carabus (una especie de bufón) y, habiéndolo colocado en un asiento elevado, para que pudiera ser visto por todos, le pusieron una diadema en la cabeza, hecha de la hierba byblos, (el antiguo papiro, o bandera de papel); su cuerpo lo cubrieron con una estera o alfombra, en lugar de un manto real. Al ver un trozo de caña, ÏαÏÏ ÏÎ¿Ï (el tallo, probablemente, de la citada hierba) tirado en el suelo, lo recogieron y se lo pusieron en la mano en lugar del cetro. Después de haberle dado un falso traje real, varios jóvenes, con varas sobre los hombros, se acercaron y se colocaron a cada lado de él como sus guardias. Entonces llegó la gente, unos para rendirle homenaje, otros para pedirle justicia y otros para consultarle sobre asuntos de estado, y la multitud que estaba alrededor hizo un ruido confuso, gritando: Mario, que es, según dicen, la palabra siria para SEÃOR; mostrando asà que pretendÃan ridiculizar a Agripa, que era sirio". Véase PHILO, Flace. p. 970, y Dr. Lardner, Obras, vol. i. p. 159.
Existe la más notable coincidencia entre este relato y el dado por los evangelistas; y la conjetura relativa al acanto probablemente encontrará un apoyo nada despreciable en los bylos y papiros de Filón. Esta planta, dice Plinio, crece hasta diez codos de largo en el tallo y las flores se usaban ad deos coronandos, para CORONAR A LOS DIOSES. Ver Hist. Nat. lib. xiii. c. 11.
Las reflexiones del piadoso Quesnel sobre estos insultos ofrecidos a nuestro bendito Señor merecen una seria atención.
Que la corona de espinas haga sonrojarse a los cristianos que desperdician tanto tiempo, dolores y dinero, en embellecer y adornar una cabeza pecadora. Que el mundo haga lo que quiera para hacer despreciables la realeza y los misterios de Cristo, es mi gloria servir a un Rey asà degradado; mi salvación, adorar lo que el mundo desprecia; y mi redención, ir a Dios por los méritos de aquel que fue coronado de espinas."
VersÃculo 30
Verso 30. Y le escupieron... "Rindamos nuestra adoración", dice el mismo piadoso escritor, "y humillémonos en silencio a la vista de un espectáculo que sólo la fe hace creÃble, y que nuestros sentidos difÃcilmente soportarÃan. Jesucristo, en esta condición, predica a los reyes de la tierra esta verdad: que sus cetros no son más que cañas, con las que ellos mismos serán golpeados, magullados y aplastados en su tribunal, si no los usan aquà para el avance de su reino."
VersÃculo 32
Verso 32. Un hombre de Cirene - a él lo obligaron a llevar su cruz...  En Juan, Juan 19:16, se nos dice que el propio Cristo llevó la cruz, y es probable que lo hiciera durante una parte del camino; pero, agotado por los azotes y otros usos crueles que habÃa recibido, se vio incapaz de llevarla solo; por lo tanto, obligaron a Simón, no creo que a llevarla por completo, sino a ayudar a Cristo, llevando una parte de ella. Era una práctica constante entre los romanos, obligar a los criminales a llevar su cruz hasta el lugar de la ejecución: hasta el punto de que Plutarco se sirve de ello como ilustración de la miseria del vicio. "Cada tipo de maldad produce su propio tormento particular, asà como cada malhechor, cuando es llevado a la ejecución, lleva su propia cruz". Véase Lardner's Credib. vol. i. p. 160.
VersÃculo 33
Verso 33. Un lugar llamado Gólgota...  Del hebreo ××××ª× o ××××ת, golgoleth, una calavera , probablemente asà llamado de los muchos cráneos de estos que habÃan sufrido crucifixión y otros castigos capitales esparcidos arriba y abajo por el lugar. Es lo mismo que Calvario , Calvaria, es decir, área de calvi capitis , el lugar de desnudos calaveras . Algunos piensan que el lugar se llamó asÃ, porque estaba en la forma de un cráneo humano. Es probable que fuera el lugar de ejecución pública, similar a la Gemoniae Scalae en Roma.
VersÃculo 34
VersÃculo 34. Le dieron vinagre - mezclado con hiel...  Quizás Ïολη, comúnmente traducido como hiel, no signifique más que amargos de cualquier tipo. Era una costumbre común administrar a los condenados una poción estupefaciente compuesta de vino agrio, que es lo mismo que vinagre, del francés vinaigre, incienso y mirra, para ayudar a aliviar sus sufrimientos, o perturbar de tal manera su intelecto que no pudieran ser sensibles a ellos. Los rabinos dicen que ponÃan un grano de incienso en una copa de vino fuerte; y lo molÃan en Proverbios 31:6: Dadle bebida fuerte al que está a punto de perecer, es decir, al que está condenado a muerte. Alguna persona, por bondad, parece haber administrado esto a nuestro bendito Señor; pero él, como en todos los demás casos, determinando soportar la plenitud del dolor, rehusó tomar lo que asà se le ofrecÃa, eligiendo pisar el lagar solo. En lugar de οξοÏ, vinagre, varios excelentes MSS. y versiones tienen οινον, vino; pero como se dice que el vino agrio era una bebida general del pueblo y de los soldados romanos, siendo lo mismo que el vinagre, no tiene mucha importancia qué lectura se adopta aquÃ. Esta costumbre de dar pociones estupefacientes a los malhechores condenados se alude en Proverbios 31:6: Dar bebida fuerte , שקר shekar, bebida embriagadora, para quien está listo para PERECER, y vino para el que es AMARGO de alma - porque solo va a sufrir el castigo de muerte. Y asà los rabinos, como hemos visto anteriormente, lo entienden. Consulte Lightfoot y Schoettgen .
Michaelis ofrece una ingeniosa exposición de este lugar: "Inmediatamente después de que Cristo fue atado a la cruz, le dieron, según Mateo 27:34,
vinagre mezclado con hiel; pero, según Marcos, le ofrecieron vino mezclado con mirra. Que el relato de San Marcos sea el correcto es probable por esta circunstancia, ya que Cristo se negó a beber lo que le ofrecieron, como se desprende de ambos evangelistas. El vino mezclado con mirra se daba a los malhechores en el lugar de la ejecución, para embriagarlos y hacerlos menos sensibles al dolor. Cristo, por lo tanto, con gran propiedad, rechazó la ayuda de tales remedios. Pero si se le ofreció vinagre, que se tomaba simplemente para calmar la sed, no habÃa razón para que lo rechazara. Además, lo probó antes de rechazarlo; y por lo tanto debió encontrarlo diferente de lo que, si se le ofrecÃa, estaba dispuesto a recibir. Para resolver esta dificultad, debemos suponer que las palabras usadas en el Evangelio hebreo de San Mateo eran tales que concordaban con el relato de San Marcos, y al mismo tiempo eran capaces de la construcción que fue puesta en ellas por el traductor griego de San Mateo. Supongamos que St. Mateo escribió ×××× ××ר××¨× (chaleea bemireera) que significa, vino dulce con amargo, o vino dulce y mirra, como lo encontramos en Marcos; y el traductor de Mateo pasó por alto la yod × en ×××× (chaleea) la tomó por ××× (chala) que significa vinagre; y amargo, lo tradujo por Ïολη, como se usa a menudo en la Septuaginta. No, San Mateo puede haber escrito ×××, y haber querido aún expresar vino dulce; si es asÃ, la diferencia sólo consistÃa en los puntos; pues la misma palabra que, cuando se pronuncia chale, significa dulce, denota vinagre, en cuanto se pronuncia chala."
Con esta conjetura el Dr. Marsh (traductor de Michaelis) no está satisfecho; y por lo tanto encuentra una palabra caldea para Î¿Î¹Î½Î¿Ï vino, que puede ser fácilmente confundida con una que denota Î¿Î¾Î¿Ï vinagre; e igualmente una palabra caldea, que significa ÏÎ¼Ï Ïνα, (mirra,) que puede ser fácilmente confundida con una que denota Ïολη, (hiel. ) "Ahora", dice, "××ר (chamar) o ×××¨× (chamera) denota realmente Î¿Î¹Î½Î¿Ï (vino,) y ×××¥ (chamets) o ×××¦× (charnetsa) denota realmente Î¿Î¾Î¿Ï (vinagre. ) Asimismo, ×××¨× (mura) significa realmente ÏÎ¼Ï Ïνα (mirra,) y ××¨×¨× (murera) significa realmente Ïολη (hiel. ) Si, pues, suponemos que el texto caldeo original era ×××¨× ×××× ××××¨× (chamera heleet bemura) vino mezclado con mirra, lo cual no es en absoluto improbable, pues es la lectura de la versión sirÃaca, en Marco 15:23, podrÃa haberse confundido fácilmente con ×××¦× ×××× ×××¨×¨× ( chametsa haleet bemurera ) vinagre mezclado con hiel ." Ãsta es una conjetura más ingeniosa que la de Michaelis. Véanse las notas de Marsh a Michaelis, vol. iii., parte 2d. pags. 127-28. Pero como ese tipo de vino agrio , que fue utilizado por los soldados romanos y la gente común, parece haber sido denominado οινοÏ, y vin aigre es vino agrio , no es difÃcil conciliar los dos relatos, en lo que es más material con los hechos aquà grabado.
VersÃculo 35
Verso 35. Y lo crucificaron ]
Crucifixión significa propiamente el acto de clavar o atar a una cruz. La cruz estaba hecha de dos vigas, que se cruzaban en la parte superior en ángulo recto, como una T, o en la mitad de su longitud, como una X. HabÃa, además, una pieza en el centro de la viga transversal, a la que se adjuntaba la acusación o declaración del crimen del culpable, y una pieza de madera que se proyectaba desde el centro, en la que la persona se sentaba, como en una especie de silla de montar; y por la que se sostenÃa todo el cuerpo. Tertuliano menciona esto particularmente: Nobis, dice, tota crux imputatur, cum antenna scilicet sua, et cum illo SEDILIS excessu. Advers. Nationes, lib. ii. Justino Mártir, en su diálogo con Trifón el JudÃo, da precisamente la misma descripción de la cruz; y es digno de observación que tanto él como Tertuliano florecieron antes de que el castigo de la cruz hubiera sido abolido. La cruz en la que padeció nuestro Señor era del primer tipo; asà se representa en todos los monumentos, monedas y cruces antiguos. San Jerónimo la compara con un pájaro volando, un hombre nadando, o rezando con los brazos extendidos. El castigo de la cruz fue infligido entre los antiguos hindúes desde tiempos inmemoriales por varias especies de robo; véase el Código de Leyes Gentoo de Halhead, p. 248, y era común entre los sirios, egipcios, persas, africanos, griegos y romanos: también se usa todavÃa entre los chinos, que no clavan, sino que atan al criminal a ella. Probablemente fueron los romanos quienes lo introdujeron entre los judÃos. Antes de estar sometidos a los romanos, utilizaban la ejecución en la horca o la guillotina, pero no la cruz. Este castigo era el más terrible de todos los demás, tanto por la vergüenza como por el dolor que suponÃa, y era tan escandaloso que se infligÃa como la última marca de detestación a las personas más viles. Era el castigo de los ladrones y asesinos, siempre que fueran esclavos; pero si eran libres, se consideraba un castigo demasiado infame para ellos, fueran cuales fueran sus crÃmenes.
El cuerpo del criminal se sujetaba a la viga vertical, clavando o atando los pies a ella, y en la pieza transversal clavando y a veces atando las manos a ella. Como las manos y los pies son los grandes instrumentos de movimiento, están provistos de una mayor cantidad de nervios; y los nervios de esos lugares, especialmente los de las manos, son especialmente sensibles. Ahora bien, como los nervios son los instrumentos de toda sensación o sentimiento, las heridas en las partes donde abundan deben ser particularmente dolorosas; especialmente cuando se infligen con instrumentos tan rudos como grandes clavos, forzados a través de los lugares por la violencia de un martillo, desgarrando asà las fibrillas nerviosas, los delicados tendones y los pequeños huesos de esas partes. Este castigo parecerá bastante espantoso, cuando se considere que a la persona se le permitÃa colgar (todo el peso de su cuerpo era soportado por sus manos clavadas y la pieza saliente que pasaba entre los muslos) hasta que perecÃa por la agonÃa y la falta de alimento. Algunos, se nos informa, han vivido tres dÃas enteros en este estado. Es cierto que, en algunos casos, se mostraba una especie de misericordia a los enfermos, que parecerá suficientemente horrible, cuando se sepa que consistÃa en romper los huesos de sus piernas y muslos en pedazos con un gran martillo, para que dejaran de sufrir cuanto antes. Un golpe de gracia como éste sólo podÃa surgir de esas tiernas misericordias de los malvados que Dios representa como la propia crueldad. A algunos se les permitÃa colgar en la cruz hasta ser devorados por aves de rapiña, que a menudo comenzaban a desgarrarlos antes de que se extinguiera la vida. Horacio alude a este castigo, y por lo que dice, parece que se infligÃa a los esclavos, c., no en ocasiones insignificantes, sino por los crÃmenes más horribles.
Si quis eum servum, patinam qui tollere jussus
Semesos pisces tepidumque ligurrierit jus,
In CRUCE suffigat. HOR. Satyr. l. i. s. 3. v. 80.
Si un pobre esclavo que te quita el plato
Lame la salsa caliente, o fragmentos medio frÃos come,
¡Aún asà deberÃas crucificar al desgraciado! &mdash&mdash FRANCIS.
Non hominem occidi: non pasces in CRUCE corvos.
"No he cometido un asesinato: Entonces no serás clavado en la cruz, para alimentar a los cuervos". HOR. Epist. l. i. s. 16. v. 48.
La angustia ocasionada por la crucifixión era tan intensa, que crucio, (un cruce,) entre los romanos, era la palabra común con la que expresaban el sufrimiento y el tormento en general.
Y repartieron sus vestidos, echando suertes...  Eran los soldados romanos que lo habÃan crucificado, y de esta circunstancia se desprende que en aquellos tiempos antiguos los despojos del criminal eran reclamados por los verdugos, como lo son hasta el dÃa de hoy. Parece que dividieron una parte, y echaron suertes para el resto: es decir, para su capa sin costuras Juan 19:23.
Para que se cumpliera lo dicho por el profeta, diciendo: Se repartieron entre ellos mis vestidos, y sobre mi vestidura echaron suertes.  Se debe omitir toda esta cita, ya que no forma parte originalmente del texto genuino de este evangelista. Casi todos los EM lo omiten. de valor e importancia, por casi todas las versiones, y el más reputado de los padres primitivos, que han escrito o comentado sobre el lugar. Las palabras son simplemente una interpolación, tomada de Juan 19:24, en cuyo lugar se notarán correctamente.
VersÃculo 36
Verso 36. Lo vigilaron... Para evitar que sus discÃpulos o parientes se llevaran el cuerpo o brindaran algún alivio al enfermo.
VersÃculo 37
Verso 37. Su acusación ] Era una costumbre común colocar una etiqueta en la cruz, dando una declaración del crimen por el cual la persona sufrÃa. Este sigue siendo el caso en China, cuando una persona es crucificada. A veces se contrataba a una persona para que lo llevara ante el criminal, mientras se dirigÃa al lugar del castigo.
Es con mucha propiedad que Mateo llama a esto αιÏια, acusación ; porque era falso que Cristo pretendiera ser REY DE LOS JUDÃOS, en el sentido que la inscripción decÃa: fue acusado de esto, pero no habÃa prueba de la acusación; sin embargo, fue fijado a la cruz. De Juan 19:21, encontramos que los judÃos deseaban que esto se modificara un poco: Escribe, dijeron, que ÃL dijo, soy rey de los judÃos ; esforzándose asÃ, mediante la adición de una vil mentira, por tolerar su propia conducta al darle muerte. Pero Pilato se negó a hacerlo. Tanto Lucas, Lucas 23:38, y Juan, Juan 19:20, dicen que esta acusación fue escrita en griego, latÃn y Hebreo. En esos tres idiomas, podemos concebir que la etiqueta esté asÃ, de acuerdo con el relato dado por San Juan; el hebreo es el dialecto mixto que luego se habla.
En Hehrew - εβÏαιÏÏι:
×ש××¢ × ×¦×¨×× ×××× ×××××××
En griego - ελληνιÏÏα:
ÎÎΣÎΥΣ Î ÎÎÎΩΡÎÎÎΣ Î ÎÎΣÎÎÎΥΠΤΩΠÎÎÎ¥ÎÎÎΩÎ
En latÃn - ÏÏμαιÏÏι:
IUDAEORUM IESUS NAZARENUS REX
Solo es necesario observar, que todas las letras, tanto del alfabeto griego como del romano, eran las que ahora se llaman cuadrado o uncial , similar a los anteriores.
VersÃculo 38
VersÃculo 38. Dos ladrones... ληÏÏαι, ladrones , o asesinos: hombres que habÃan cometido un robo y asesinato; porque no parece que las personas hayan sido crucificadas sólo por robo. Asà fue nuestro Señor numerado (su nombre inscrito, puesto por asà decirlo en la sentencia de muerte) con transgresores , según la declaración profética, IsaÃas 53:12; y los judÃos lo colocaron entre estos dos, quizás para insinuar que él era el peor delincuente de los tres .
VersÃculo 39
VersÃculo 39. Meneando la cabeza... En señal de desprecio.
VersÃculo 40
VersÃculo 40. Tú que destruyes... Que pretendes que podrÃas haber destruido el templo y volverlo a construir en tres dÃas. Esta tortura maliciosa de las palabras de nuestro Señor se ha notado antes. La crueldad se ve obligada a refugiarse en la mentira para reivindicar sus infames actos.
Si eres el Hijo de Dios... O más bien, Î¥á¼±Î¿Ï ÏÎ¿Ï ÎÎµÎ¿Ï Un hijo de Dios, es decir, un peculiar favorito del AltÃsimo; no á½ Î¥á¼±Î¿Ï ÏÎ¿Ï ÎÎµÎ¿Ï , EL Hijo de Dios. "No es de concebir", dice un erudito, "que cada pasajero que iba a la ciudad tuviera un conocimiento competente de la concepción sobrenatural de Cristo por el EspÃritu Santo, o una comprensión adecuada de su carácter de MesÃas, y (καÏ' εξοÏην) EL HIJO DE DIOS. No hay ni un solo pasaje en el que se quiera señalar a Jesús como el MESÃAS, EL HIJO DE DIOS, en el que se omita el artÃculo: ni, por otra parte, se especifica nunca esta designación sin el artÃculo, asÃ, 'á½ Î¥á¼±Î¿Ï ÏÎ¿Ï ÎÎµÎ¿Ï .
Ver Mateo 16:16; Mateo 26:63; Mateo 28:19. "
VersÃculo 41
Verso 41. Sumos sacerdotes - escribas y ancianos... A estos, varios MSS. y versiones antiguas añaden, και ΦαÏιÏαιÏν, y fariseos. Pero aunque la autoridad para esta lectura es respetable, no parece que los fariseos se unieran a los demás en la condena de nuestro Señor. Probablemente sus discursos y parábolas, relatados en algunos de los capÃtulos anteriores, que se dirigÃan directamente a ellos, los habÃan convencido de tal manera que al menos no tomarÃan parte en su muerte. Toda la infamia de esto parece recaer sobre los SACERDOTES, los escribas y los ancianos.
VersÃculo 42
Verso 42. Salvó a otros; a sà mismo no puede salvarse... O bien, ¿no puede salvarse a sà mismo? Varias S.M. lo leen con el signo de interrogación anterior, lo que agudiza aún más el sarcasmo.
Un sumo sacerdote que pretende destruir el templo de Dios; un Salvador que no se salva a sà mismo; y el Hijo de Dios crucificado: estas son las contradicciones que ofenden a judÃos y libertinos. Pero un sumo sacerdote que disipa los tipos y las sombras, sólo para poder revelar la sustancia de la religión, y convertirse en el ministro de un santuario celestial; un Salvador que muere sólo para ser la vÃctima de la salvación; y el Hijo de Dios que confina su poder dentro de los lÃmites de la cruz para establecer la justicia de la fe: esto es lo que un cristiano adora; éste es el fundamento de su esperanza, y la fuente de su consuelo presente y su bendición final. Véase Quesnel.
Le creeremos... En lugar de Î±Ï ÏÏ, él, muchos excelentes MSS. tienen εÏ' Î±Ï Ïῳ, EN él: ésta es una lectura que Griesbach y otros eminentes crÃticos han adoptado.
VersÃculo 43
VersÃculo 43. Si lo quiere... O, si se deleita en él - ει θελει Î±Ï Ïον. Los verbos Î¸ÎµÎ»Ï y εθελÏ, son usados por la Septuaginta en más de cuarenta lugares para el hebreo ×פץ chaphets, que significa, desear fervientemente, o deleitarse. Ahora bien, como se trata de una cita de Salmo 22:8,, Confiaba en el Señor, que lo librarÃa; que lo libere, (×× ×פץ ×× ki chaphets bo,) porque se ha deleitado en él: - á½Ïι θελει Î±Ï Ïον, Sept. Esto reivindicará suficientemente la traducción anterior; ya que el evangelista cita las palabras de esa versión, con el simple cambio de ει, si, por á½Ïι, porque.
VersÃculo 44
VersÃculo 44. También los ladrones - echó lo mismo entre los dientes]. Es decir, uno de los ladrones; pues uno de ellos, según encontramos, era un penitente, Lucas 23:39. Véase la explicación de esta forma de expresión en  Mateo 26:8.
VersÃculo 45
Verso 45. HabÃa oscuridad sobre toda la tierra...  Soy de la opinión de que ÏαÏαν Ïην γην no significa todo el mundo, sino solo la tierra de Judea. Entonces, la palabra se usa Mateo 24:30; Lucas 4:25 y en otros lugares.
Varios crÃticos eminentes son de esta opinión: Beza defiende este sentido de la palabra, y traduce el griego, super universam REGIONEM sobre todo el PAÃS. Además, es evidente que los evangelistas hablan de cosas que sucedieron en Judea, el lugar de su residencia. Es bastante claro que hubo una oscuridad en Jerusalén, y sobre toda Judea; y probablemente sobre todo el pueblo entre el que Cristo habÃa predicado durante más de tres años el Evangelio eterno; y que esta oscuridad era sobrenatural es evidente por esto, que ocurrió durante la pascua, que se celebraba sólo en la luna llena, un tiempo en el que era imposible que el sol se eclipsara. Pero muchos suponen que las tinieblas se extendieron por todo el mundo, y piensan que hay suficientes pruebas de ello en los autores antiguos. Se supone que PHLEGON y THALLUS, que florecieron a principios del siglo II, hablan de esto. El primero dice: "En el cuarto año de la Olimpiada 202, hubo un extraordinario eclipse de sol: a la hora sexta, el dÃa se convirtió en noche oscura, de modo que se vieron las estrellas del cielo; y hubo un terremoto en Bitinia, que derribó muchas casas en la ciudad de Niza." Esta es la sustancia de lo que se dice que Flegón dijo sobre este tema: - pero
1. Todos los autores que lo citan difieren, y a menudo muy significativamente, en lo que dicen que se encontró en él.
2. Flegón no dice nada de Judea: lo que dice es, que en tal Olimpiada, (algunos dicen que la 102ª, otros la 202ª,) hubo un eclipse en Bitinia, y un terremoto en Niza.
3. Flegón no dice que el terremoto ocurriera en el momento del eclipse.
4. Flegón no insinúa que esta oscuridad fuera extraordinaria, ni que el eclipse se produjera con la luna llena, ni que durara tres horas. Estas circunstancias no podrÃan haber sido omitidas por él, si las hubiera conocido.
5. Flegón habla simplemente de un eclipse de sol ordinario, aunque quizás total, y no puede referirse a la oscuridad mencionada por los evangelistas.
6. 6. Flegón habla de un eclipse que ocurrió en algún año de la 102ª o 202ª Olimpiada, y por lo tanto no se puede hacer hincapié en lo que dice como aplicable a este evento.
La cita de THALLUS, hecha por AFRICANUS, que se encuentra en la Crónica de SYNCELLUS, del siglo VIII, es considerada por los crÃticos eminentes como de poca importancia. En ella se habla "de una oscuridad sobre todo el mundo, y de un terremoto que derribó muchas casas en Judea y en otras partes de la tierra". Puede ser necesario observar, que THALLUS es citado por varios de los antiguos escritores eclesiásticos para otros asuntos, pero nunca para esto; y que el tiempo en el que vivió es tan incierto, que el Dr. Lardner supone que hay espacio para pensar que vivió más bien antes que después de Cristo.
Se supone que DIONISIO el Areopagita mencionó este acontecimiento de la manera más decidida: porque estando en Heliópolis en Egipto, con su amigo Apolófanes, cuando nuestro Salvador sufrió, vieron allà un maravilloso eclipse de sol, con lo cual Dionisio dijo a su amigo: "O Dios mismo sufre, o se compadece del que sufre". Basta decir de este hombre que todos los escritos que se le atribuyen son espurios y se ha demostrado que son falsificaciones del siglo V o VI. Quien desee ver más sobre este tema, puede consultar al Dr. Lardner, (vol. vii. p. 371, ed. 1788), un hombre cuyo nombre no debe ser mencionado sino con respeto, a pesar de las peculiaridades de su credo religioso; que ha hecho más al servicio de la revelación divina que la mayorÃa de los divinos de la cristiandad; y que ha levantado un monumento a la perpetuidad de la religión cristiana, que todos los infieles de la creación nunca podrán derribar o desfigurar.
Esta milagrosa oscuridad deberÃa haber hecho comprender a los enemigos de Cristo que él era la luz del mundo, y que por no caminar en ella les era ahora arrebatada.
VersÃculo 46
VersÃculo 46. ¡Dios mÃo! ¡Dios mÃo! ¿Por qué me has desamparado?  Estas palabras son citadas por nuestro Señor de Salmo 22:1; son de gran importancia y deben considerarse cuidadosamente.
Algunos suponen "que la divinidad se habÃa apartado ahora de Cristo, y que su naturaleza humana quedaba sin apoyo para soportar el castigo debido a los hombres por sus pecados". Pero esto no debe admitirse de ninguna manera, ya que privarÃa a su sacrificio de su mérito infinito, y en consecuencia dejarÃa el pecado del mundo sin expiación. Si se quita la deidad de cualquier acto redentor de Cristo, se arruina la redención. Otros imaginan que nuestro Señor dijo estas palabras sólo a los judÃos, para demostrarles que era el MesÃas. Los judÃos", dicen, "creÃan que este salmo hablaba del MesÃas: citaron el octavo verso del mismo contra Cristo: "Confió en Dios para que lo librara; que lo libre, ya que se deleitó en él". (Ver Mateo 27:43.)
A lo que nuestro Señor responde inmediatamente: ¡Dios mÃo! ¡Dios mÃo! , mostrando asà que era la persona de la que profetizaba el salmista". Tengo dudas sobre la conveniencia de esta interpretación.
Se ha preguntado: ¿Qué idioma es el que habló nuestro Señor? Eli, Eli, lama sabachthani. Algunos dicen que es hebreo, otros que es sirio. Yo digo que, tal como lo citan los evangelistas, no es ninguna de las dos. San Mateo se acerca más al hebreo, ××× ××× ××× ×¢×××ª× × Eli, Eli, lamah azabthani, en las palabras, Îλι, Îλι, λαμα ÏαβαÏθανι, Eli, Eli, lama sabachthani.
Y San Marcos se acerca más al sirÃaco Marco 15:34, [Siriaco] Alohi, Alohi, l'mono shebachtheni, en las palabras ÎλÏÎ, ÎλÏÎ, λαμμα ÏαβαÏθανι, Eloi, Eloi, lamma sabachthani. Es digno de mención, que un MS. hebreo del siglo XII, en lugar de ×¢×××ª× × azabthani, me ha abandonado, lee ש×××ª× × shechachthani, me ha olvidado. Esta palabra tiene un sentido muy bueno, y se acerca más al sabachthani de los evangelistas. Puede observarse también que las palabras "¿Por qué me has olvidado?" son usadas a menudo por David y otros, en tiempos de opresión y angustia. Consulte Salmo 42:9.
Algunos han aprovechado estas palabras para depreciar el carácter de nuestro bendito Señor. "Son indignas", dicen, "de un hombre que sufre, consciente de su inocencia, y argumentan imbecilidad, impaciencia y desesperación". Esto no se deduce en absoluto con justicia del pasaje. Sin embargo, algunos piensan que las palabras, tal como están en el hebreo y el sirÃaco, son capaces de una traducción que destruye todas las objeciones y obvia toda dificultad. La partÃcula ××× lamah, puede ser traducida, a qué - a quién - a qué clase o tipo - a qué propósito o beneficio: Génesis 25:32; Génesis 32:29; Génesis 33:15; Job 9:29; Jeremias 6:20; Jeremias 20:18; Amós 5:18; y el verbo ×¢×× azab significa dejar - depositar - comprometerse con el cuidado de . Ver Génesis 39:6; Job 39:11; Salmo 10:14 y Jeremias 49:11.
Las palabras, tomadas de este modo, podrÃan traducirse asà Dios mÃo, Dios mÃo, ¿a qué clase de personas me has dejado? Las palabras asà entendidas deben referirse más bien a los malvados judÃos que a nuestro Señor, y son una exclamación indicativa de la obstinada maldad de sus crucificadores, que endurecieron sus corazones contra toda operación del EspÃritu y del poder de Dios. Ver Ling. Brit. Reform. de B. Martin, p. 36.
A lo largo de todos los Escritos Sagrados, Dios es representado como haciendo aquellas cosas que, en el curso de su providencia, sólo permite que se hagan; por lo tanto, las palabras, a quién me has dejado o entregado, son sólo una forma de expresión de, "¡Cuán asombrosa es la maldad de aquellas personas en cuyas manos he caÃdo!" Si se admite esta interpretación, se liberará a este célebre pasaje de mucha vergüenza y se le dará un sentido coherente con él mismo y con la dignidad del Hijo de Dios.
Las palabras de San Marcos, âââââââ Marco 15:34,
coinciden bastante con esta traducción del hebreo: ÎÎ¹Ï Ïι με εγκαÏιλεÏεÏ; ¿A qué [clase de personas, se entiende] me has dejado? Una traducción literal del pasaje en el Testamento SirÃaco da un sentido similar: Ad quid dereliquisti me? "¿A qué me has abandonado?" Y una antigua copia de la antigua versión Itala, una traducción latina anterior a la época de San Jerónimo, traduce las palabras asÃ: Quare me in opprobrium dedisti? "¿Por qué me has abandonado al oprobio?"
Se puede objetar que esto no puede coincidir con el ιναÏι, por qué, de Mateo. A esto se responde que ιναÏι debe tener aquà el mismo significado que ÎµÎ¹Ï Ïι - como la traducción de ××× lama; y que, si el significado es en absoluto diferente, debemos seguir a aquel evangelista que expresa más literalmente el significado del original: y obsérvese que la Septuaginta traduce a menudo ××× por ιναÏι en lugar de ÎµÎ¹Ï Ïι, lo que prueba evidentemente que a menudo tenÃa el mismo significado. De esta crÃtica digo, Valet quod valet, Que pase por no más de lo que vale: el tema es difÃcil. Pero, independientemente de lo que se piense del anterior modo de interpretación, una cosa es cierta, a saber, que las palabras no pudieron ser utilizadas por nuestro Señor en el sentido en que generalmente se entienden. Esto es suficientemente evidente, porque él sabÃa muy bien por qué habÃa venido a esa hora, y no podÃa ser abandonado por Dios, en quien residÃa toda la plenitud de la Divinidad. La Deidad, sin embargo, podÃa restringir tanto su apoyo consolador como para dejar a la naturaleza humana plenamente sensible a todos sus sufrimientos, de modo que los consuelos no pudieran quitar ninguna parte del filo de su pasión; y esto era necesario para hacer meritorios sus sufrimientos. Y es probable que esto sea todo lo que se pretende con la cita de nuestro Señor del Salmo veintidós. Desde este punto de vista, las palabras tienen un sentido inmejorable, incluso en la traducción común.
VersÃculo 47
VersÃculo 47. Este hombre llama a ElÃas... Probablemente estos eran HelenÃstico JudÃos, que no entendieron completamente el significado de las palabras de nuestro Señor. Se esperaba que ElÃas diariamente apareciera como el precursor del MesÃas, cuya llegada, bajo el carácter de un prÃncipe poderoso, generalmente se suponÃa que estaba cerca en todo el este. Ver MalaquÃas 4:5; Mateo 2:2; Mateo 17:10.
VersÃculo 48
Verso 48. Tomó una esponja...  Siendo esta la forma más conveniente de llegar un lÃquido a su boca; lo ató a una caña , para que pudieran llegar a sus labios con él. Esta caña, como aprendemos de San Juan, era un tallo de hisopo , que, en ese paÃs, debe haber crecido a una magnitud considerable. Esto también parece haber sido hecho en misericordia , para aliviar sus sufrimientos. Consulte Mateo 27:34.
VersÃculo 49
VersÃculo 49. Después de este versÃculo, BCL y otros cinco agregan, Otro, tomando una lanza, le atravesó el costado, y vino sangre y agua . Varios de los padres añaden las mismas palabras aquÃ: sin embargo, parecen ser una interpolación de Juan 19:34.
VersÃculo 50
Verso 50. Entregó el espÃritu... αÏηκε Ïο ÏÎ½ÎµÏ Î¼Î±, despidió al espÃritu. Ãl mismo entregó voluntariamente esa vida que era imposible que el hombre le quitara. No se dice que colgara de la cruz hasta morir por el dolor y la agonÃa; tampoco se dice que se le quebraran los huesos, para quitarle antes el dolor y acelerar su muerte; sino que él mismo despidió el alma, para convertirse asÃ, no en un sacrificio forzado, sino en una ofrenda voluntaria por el pecado.
Ahora bien, como nuestra palabra inglesa ghost, del anglosajón [anglosajón] gast, un habitante, huésped, (un visitante casual,) también un espÃritu, se restringe ahora entre nosotros a este último significado, significando siempre el espÃritu o alma inmortal del hombre, el huésped del cuerpo y como entregar el espÃritu, fantasma o alma, es un acto no propio del hombre, aunque encomendarlo a Dios, en nuestros últimos momentos, es tanto un acto de fe como de piedad; y como entregar el espÃritu, i. es decir, despedir su espÃritu de su cuerpo, se atribuye a Jesucristo, a quien sólo es propio; por lo tanto, me opongo a su uso en cualquier otro caso.
Todos los hombres, desde la caÃda, no sólo han estado expuestos a la muerte, sino que la han merecido, ya que todos han perdido la vida a causa del pecado. Jesucristo, al haber nacido inmaculado y no haber pecado nunca, no ha perdido su vida y, por lo tanto, puede ser considerado como natural y propiamente inmortal. Nadie, dice él, me quita, mi vida, sino que la pongo por mà mismo: Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volver a tomarla; por eso el Padre me ama, porque pongo mi vida para volver a tomarla,  Juan 10:17. Por lo tanto, traducimos correctamente Mateo 27:50, αÏηκε Ïο ÏÎ½ÎµÏ Î¼Î±, abandonó el espÃritu ; es decir, rechazó su espÃritu , que él podrÃa morir por el pecado del mundo . El evangelista San Juan ( Juan 19:30) hace uso de una expresión del mismo sentido, que traducimos de la misma manera: ÏαÏεδÏκε Ïο ÏÎ½ÎµÏ Î¼Î±, él entregó su espÃritu . Traducimos Marco 15:37, y Lucas 23:46, entregó el fantasma , pero no correctamente, porque la palabra en ambos lugares es muy diferente - εξεÏÎ½ÎµÏ Ïε, respiró por última vez , o vencido ; aunque en el último lugar, Lucas 23:46, hay una expresión equivalente - Oh Padre, en tus manos , ÏαÏαÏιθεμαι Ïο ÏÎ½ÎµÏ Î¼Î± Î¼Î¿Ï , Comprometo mi espÃritu ; es decir, pongo mi alma en tu mano: probando que el acto fue suyo ; que ningún hombre podrÃa quitarle la vida; que no murió por la perfidia de su discÃpulo, o la malicia de los judÃos , sino por su propio acto libre . Asà EL DIàsu vida por la oveja . De AnanÃas y Safira, Hechos 5:5; Hechos 5:10, y de Herodes, Hechos 12:23, nuestra traducción dice, entregaron el fantasma; pero la palabra en ambos lugares es εξεÏÏ Î¾Îµ, que significa simplemente exhalar, expirar o morir: pero en ningún caso, ni por la Septuaginta en el Antiguo, ni por ninguno de los escritores sagrados en el Nuevo Testamento, se dice αÏηκε Ïο ÏÎ½ÎµÏ Î¼Î±, o ÏαÏεδÏκε Ïο ÏÎ½ÎµÏ Î¼Î±, despidió su espÃritu, o entregó su espÃritu, de ninguna persona sino de Cristo. Abraham, Isaac, Ismael, Jacob, c., expiraron AnanÃas, Safira y Herodes; pero ninguno, exceptuando a Jesucristo, despidió su espÃritu, o entregó su propio espÃritu, y fue, en consecuencia, libre entre los muertos. De los patriarcas, c., la Septuaginta usa la palabra εκλειÏÏν, fallando o καÏεÏÎ±Ï Ïεν, cesó, o descansó.
VersÃculo 51
Verso 51. El velo del templo se rasgó...  Es decir, el velo que separaba el lugar santo, donde los sacerdotes ejercÃan su ministerio, del lugar santÃsimo, en el que sólo entraba el sumo sacerdote, y eso una vez al año, para hacer una expiación general por los pecados del pueblo. Este rasgamiento del velo era emblemático, y señalaba que la separación entre judÃos y gentiles estaba ahora abolida, y que el privilegio del sumo sacerdote se comunicaba ahora a toda la humanidad: En adelante, TODOS podrÃan tener acceso al trono de la gracia, por medio de la única gran expiación y mediador, el Señor Jesús. Vea esto bellamente ilustrado en Hebreos 10:19.
VersÃculo 52
Verso 52. Y las tumbas fueron abiertas...  Por el terremoto; y muchos cuerpos de santos que dormÃan, es decir, estaban muertos, dormir es una expresión común para muerte en las Escrituras.
VersÃculo 53
Verso 53. Y salieron de los sepulcros después de su resurrección...  No antes, como algunos han pensado, pues Cristo mismo fue la PRIMERA FRUTA de los que durmieron,  1 Corintios 15:20 Los sepulcros fueron abiertos a su muerte, por el terremoto, y los cuerpos salieron a su resurrección.
Y apareció a muchos.... Estableciendo asà la verdad de la resurrección de nuestro Señor en particular, y de la resurrección del cuerpo en general, por muchos testigos. Las reflexiones de Quesnel sobre estos pasajes pueden ser muy útiles.
"1. El desgarro del velo muestra que su muerte es para poner fin al culto figurado, y para establecer la verdadera religión.
2. El terremoto, que esta dispensación del Evangelio es para dar a conocer a través de la tierra los juicios de Dios contra el pecado y los pecadores.
3. Las rocas desgarradas declaran que el sacrificio de Cristo ha de dar paso a la gracia del arrepentimiento.
4. Las tumbas siendo abiertas, que es para destruir la muerte del pecado, y conferir la gracia de la vida a los pecadores.
5. La resurrección de los cuerpos de los santos muestra que esta muerte de Cristo es para merecer, y su Evangelio publicar, la felicidad eterna de cuerpo y alma para todos los que creen en su nombre."
Es difÃcil explicar la acción mencionada Mateo 27:52-40. Algunos han pensado que estos dos versÃculos se han introducido en el texto de Mateo a partir del evangelio de los nazarenos; otros piensan que el significado simple es este: - por el terremoto, varios cuerpos que habÃan sido enterrados fueron arrojados y expuestos a la vista, y continuaron sobre el suelo hasta después de la resurrección de Cristo, y fueron vistos por muchas personas en la ciudad. Por qué las tumbas deben abrirse el viernes , y los cuerpos no deben resucitar hasta el domingo siguiente, es difÃcil de concebir. El texto es extremadamente oscuro.
VersÃculo 54
Verso 54. El centurión... El oficial romano que supervisó la ejecución, llamado centurio , de centum , cien, porque tenÃa el mando de cien hombres.
Verdaderamente este era el Hijo de Dios... Una persona inocente, santa y divina; y Dios muestra asà su desaprobación de esta sangrienta tragedia. No es probable que este centurión tuviera conocimiento de la expectativa de los judÃos en relación con el MesÃas, y no usó las palabras en este sentido. Un hijo de Dios , como los romanos usaban el término, no significarÃa más que un eminente o Divina persona ; un héroe .
VersÃculo 55
VersÃculo 55. Muchas mujeres...  Para su eterno honor, estas mujeres evidenciaron más coraje , y apego afectuoso a su Señor y Maestro, que los discÃpulos, quienes habÃan prometido morir con él en lugar de abandonarlo.
Contemplar de lejos...  A distancia - αÏο μακÏοθεν. Aunque se puede entender que esta expresión se refiere, más bien a la distancia desde la que vinieron (es decir, desde Galilea), que a la distancia a la que se encontraban de la cruz ; Sin embargo, como todos los malhechores fueron crucificados desnudos , tal vez esto pueda explicar la distancia a la que estas modestas mujeres se pusieron de pie.
VersÃculo 56
Verso 56. MarÃa Magdalena...  Probablemente tenÃa su nombre de Magdala , un pueblo o distrito en la Baja Galilea. Consulte Mateo 15:39. Algunos piensan que fue llamada Magdalena de ××××× magdala , que significa una trenza de cabello . Ver Lightfoot.
MarÃa, la madre de Santiago...  Ella era la madre de él llamado Santiago el menor , o menor, que era hijo de Alfeo o Cleofás - ver Mateo 10:3; Marco 15:40; Juan 19:25; y era hermana de la santa virgen. Por lo tanto, parece que hubo cuatro MarÃas notables mencionadas en los Evangelios.
1. MARÃA la Virgen , esposa de JOSÃ.
2. MARY SALOME, su hermana, esposa de Cleofas , Juan 19:25.
3. MARÃA MAGDALENA, o MARÃA de Magdala ; y,
4. MARIA, la hermana de Marta y Lázaro , Juan 11:1.
Aunque Baronius afirma, y ââLightfoot tiene la misma opinión, que MarÃa Magdalena y MarÃa, la hermana de Marta y Lázaro, eran una y la misma persona. Es difÃcil determinar y distinguir a estas mujeres donde aparecen sus nombres en los Evangelios, muchas son llamadas por el nombre de MarÃa .
José...  Varios MSS. y las versiones leen Joseph .
VersÃculo 57
Verso 57. Cuando llegó la noche...  Esto debe haber sido alrededor de las tres en punto, o un poco después; porque nuestro Señor expiró alrededor de las tres en punto , Mateo 27:46, y la pascua judÃa comenzando alrededor de cuatro , era necesario que José, que no dejarÃa de comer la pascua a la hora habitual, hubiera obtenido y enterrado el cuerpo de Cristo algún tiempo antes de las cuatro en punto. Pero tal fue la consternación general, ocasionada por los prodigios que tuvieron lugar en esta terrible ocasión, que podemos conjeturar con seguridad que no se hizo nada en orden , y tal vez la Pascua misma no se comÃa a la hora habitual, si es que se comÃa, ese dÃa. Ver al final del capÃtulo anterior.
Un hombre rico...  Fue consejero del gran SanedrÃn, Lucas 23:50; y, de los relatos que los evangelistas dieron de él, aprendemos que era un hombre de la mayor respetabilidad. Ahora desempeñó un papel más honorable que todos los discÃpulos de nuestro Señor. Era de Arimathea , o Rama , en la tribu de BenjamÃn, Mateo 2:18, pero vivÃa habitualmente en Jerusalén, como miembro del gran consejo.
VersÃculo 58
Verso 58. Pidió el cuerpo...  Que lo enterrara honorablemente de lo contrario, según las costumbres judÃas, habrÃa sido quemado , o enterrado en el lugar común designado para los criminales ejecutados.
VersÃculo 59
Verso 59. Envuelto en un lienzo limpio de lino... Los judÃos, asà como los egipcios, agregaron especias para evitar que el cuerpo se pudriera, y el lino fue envuelto sobre cada parte para mantener los aromáticos en contacto con la pulpa. De Juan 19:39, aprendemos que se habÃa aplicado una mezcla de mirra y áloe de cien libras de peso al cuerpo de Jesús cuando fue enterrado. Y que se pretendÃa realizar un segundo embalsamamiento, lo aprendemos de Lucas 23:56; Lucas 24:1, ya que la prisa por enterrar el cuerpo antes del sábado no les permitió completar, el embalsamamiento en primera instancia. Vea un relato del modo de embalsamar entre los egipcios, en la nota sobre Génesis 50:2; Génesis 50:26.
VersÃculo 60
Verso Mateo 27:60. Lo puso en su propia tumba nueva...  Según todas las apariencias humanas, el cuerpo de Cristo debió tener el mismo lugar de sepultura que el de los dos ladrones, ya que fue contado con los transgresores y sufrió con ellos; porque entonces fue un sacrificio, llevando el pecado del mundo en su propio cuerpo en el madero; pero ahora que el sacrificio es ofrecido, la expiación hecha y aceptada, ya no va a ser inscrito con los transgresores, y, según una profecÃa pronunciada casi setecientos años antes de ese tiempo, va a tener el lugar de sepultura de un hombre rico. Consulte IsaÃas 53:9.
Si nuestro Señor hubiera sido enterrado en el cementerio común de los malhechores, su resurrección no habrÃa podido ser observada tan claramente, ya que a los jefes de los sacerdotes no se les habrÃa ocurrido sellar la piedra allÃ, o poner un reloj; pero ahora que el cuerpo está en manos de un amigo, juzgan necesario hacer uso de estas precauciones, con el fin, como dijeron, de evitar la impostura; y de esta misma circunstancia la resurrección de Cristo tuvo su más completa evidencia, y fue puesta más allá del poder de la contradicción exitosa. ¡Qué cantidad de objeciones no habrÃa hecho la prudencia humana a la conducta de José, si la hubiera consultado en esta ocasión! Le habrÃa representado que "esto era exponerse, meterse en problemas, hacerse sospechoso, ponerse fuera de toda capacidad de hacer el bien, arruinarse irremediablemente; y ahora no podÃa hacer ningún bien a su maestro -ya está muerto, y ya no necesita ningún oficio de bondad de los hombres". A veces, en toda nuestra vida, no hay más que una oportunidad en la que Dios se propone emplearnos de manera significativa; y, por nuestro atraso general en toda obra buena, nos reservamos para otras oportunidades, en las que Dios no requiere ni aceptará nuestros servicios.
Rodaron una gran piedra a la puerta...  Algunos opinan que este sepulcro fue cortado en la roca, perpendicularmente desde la superficie; y que la gran piedra de la que se habla aquà cubrÃa la entrada del mismo. La piedra, sin duda, tenÃa por objeto asegurar el lugar lo más posible.
VersÃculo 61
Verso Mateo 27:61. MarÃa Magdalena y la otra MarÃa... La madre de Santiago y Jose, Mateo 27:56. La madre de nuestro Señor probablemente, para ese momento, habÃa sido llevada a la casa de Juan. Consulte Juan 19:26.
Sentadas frente al sepulcro... Estas santas mujeres, llenas de ese amor a su Señor que la muerte no puede destruir, se unieron a él en vida, y en la muerte no fueron dividido. Llegaron a la tumba para ver el final, y abrumados por el dolor y la angustia, se sentaron abajo llorar.
VersÃculo 62
Verso Mateo 27:62. Al dÃa siguiente...  Este fue el séptimo , o Sábado , y podrÃa ser lo que deberÃamos llamar la noche del sexto , o viernes , porque los judÃos siempre terminaban su dÃa cuando se ponÃa el sol y luego comenzaban el siguiente.
Que siguió al dÃa de la preparación...  Es decir, del Sábado . Los vÃveres, que iban a ser utilizados el sábado por los judÃos, siempre eran preparados la noche anterior antes de la puesta del sol. Es de esta preparación que el evangelista habla aquà y es el mismo que menciona Marcos, Marco 15:42; por Lucas, Lucas 23:54; y por Juan, Juan 19:31. Pero hubo otra preparación que ocurrió el mismo dÃa: a saber. La preparación de la pascua; esto comenzó alrededor de las doce y continuó hasta las cuatro, hora en que comieron el cordero pascual. Consulte Juan 19:14.
VersÃculo 63
Verso Mateo 27:63.
Señor, recordamos...  Mientras estos hombres malvados están cumpliendo sus propios consejos viciosos, están sirviendo a la gran causa del cristianismo. Todo dependÃa de la resurrección de Cristo, si no aparecÃa que habÃa resucitado de entre los muertos, entonces todo el sistema era falso, y no se hacÃa expiación. Por lo tanto, era necesario que los jefes de los sacerdotes, etc., tomaran todas las precauciones necesarias para evitar una impostura, a fin de que la resurrección de Cristo tuviera la mayor evidencia para apoyarla. Mateo 27:60.
La palabra ÎÏ Ïιε se traduce aquà muy propiamente por señor, que, en muchos otros lugares, se traduce tan impropiamente por Señor. Cuando un romano es el orador, o la persona a la que se dirige, ÎÏ Ïιε debe traducirse siempre señor cuando los extraños se dirigen a nuestro Señor, la palabra es un tÃtulo de respeto civil, y debe, en general, traducirse de la misma manera.
Después de tres dÃas resucitaré... Esto lo tomaron probablemente de su frase: Destruid este templo, y en tres dÃas lo reedificaré. Si es asÃ, destruyeron, con sus propias palabras, la falsa acusación que presentaron contra él para darle muerte; entonces pervirtieron el significado, ahora lo declaran. Asà los sabios son tomados en su propia astucia. Ni el diablo ni sus siervos dicen nunca la verdad, sino cuando esperan lograr con ella algún mal propósito.
VersÃculo 64
Verso Mateo 27:64. No sea que sus discÃpulos vengan de noche...  ÎÏ ÎºÏοÏ, de noche , falta en
diez del manuscrito uncial, y en varios otros, y en la mayorÃa de las versiones. Erasmus, Aldus, Bengel y Boghard , con Griesbach , lo dejó fuera del texto.
VersÃculo 65
Verso Mateo 27:65.
Tenéis una guardia... Los judÃos tenÃan un cuerpo de tropas romanas, formado por varias compañÃas, como guardia del templo, Hechos 4:1. Estas compañÃas montaban guardia por turnos, véase Lucas 22:4. Algunas de estas compañÃas, que no estaban entonces de servicio, Pilato les dio permiso para emplearlas en la vigilancia del sepulcro.
VersÃculo 66
Verso Mateo 27:66. Aseguró el sepulcro, sellando la piedra y poniendo una guardia... O más bien, hizo seguro el sepulcro mediante la guardia, y sellando la piedra. Sigo a Kypke, al interpretar μεÏα ÏÎ·Ï ÎºÎ¿Ï ÏÏÏδιαÏ, con ηÏÏαλιÏανÏο. El guardia debÃa cuidar de que los discÃpulos no lo robaran; y el sello, que probablemente era el del gobernador, debÃa evitar que los guardias se corrompieran para permitir el robo. Asà pues, se hizo todo lo que la polÃtica y la prudencia humanas podÃan hacer para impedir una resurrección, que estas mismas precauciones tenÃan la tendencia más directa a autentificar y establecer. ¡Qué maravillosa es la sabidurÃa y la bondad de Dios! - y ¡qué cierto es que no hay fuerza ni consejo contra él!
1. La muerte de Cristo fue ordenada, de modo que fuera atestiguada por miles; y si su resurrección tiene lugar, debe ser demostrada; y no puede tener lugar sin ser incontestable, tales son las precauciones usadas aquà para prevenir toda impostura.
2. Cuanto más se examinen las circunstancias de la muerte de Cristo, más sorprendente parecerá el conjunto. La muerte es poco común, la persona es poco común y el objeto es poco común; y el conjunto es grandioso, majestuoso y terrible. La naturaleza misma es lanzada a una acción inusual, y por medios y causas totalmente sobrenaturales. En cada parte, el dedo de Dios aparece de manera muy evidente.
3.  ¡Qué glorioso aparece Cristo en su muerte! Si no fuera por su sed, su exclamación en la cruz y la perforación de su costado, nos habrÃa resultado difÃcil creer que una persona asà pudiera entrar en el imperio de la muerte; pero la divinidad y la hombrÃa aparecen por igual, y asà la certeza de la expiación queda indudablemente establecida.
4. Pero ¿quién puede reflexionar sobre el estado de los pobres discÃpulos, durante todo el tiempo en que nuestro bendito Señor estuvo bajo el imperio de la muerte, sin compartir sus penas? Cuando expiró en la cruz, sus esperanzas se vieron truncadas; y cuando su cuerpo fue depositado en el sepulcro, sus esperanzas quedaron sepultadas; y nada más que la resurrección de Cristo de entre los muertos podrÃa haber hecho resurgir sus esperanzas. Es cierto que le habÃan oÃdo decir que resucitarÃa al tercer dÃa; pero en esto es evidente que su fe era muy imperfecta; y no se puede describir ni imaginar la incertidumbre, la perplejidad, la ansiedad y la angustia que debieron sufrir en consecuencia. Aunque conocemos el glorioso resultado, ¡quién puede evitar compadecerse del piadoso padre, de la virgen madre y de los desconsolados discÃpulos!