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Sunday, December 22nd, 2024
the Fourth Week of Advent
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Bible Commentaries
Comentario Crítico y Explicativo de toda la Biblia Comentario Crítico
Declaración de derechos de autor
Estos archivos son un derivado de una edición electrónica preparada a partir de texto escaneado por Woodside Bible Fellowship. Esta edición expandida del Comentario Jameison-Faussett-Brown está en el dominio público y puede ser utilizado y distribuido libremente.
Estos archivos son un derivado de una edición electrónica preparada a partir de texto escaneado por Woodside Bible Fellowship. Esta edición expandida del Comentario Jameison-Faussett-Brown está en el dominio público y puede ser utilizado y distribuido libremente.
Información bibliográfica
Jamieson, Robert, D.D.; Fausset, A. R.; Brown, David. "Comentario sobre Genesis 28". "Comentario Crítico y Explicativo de toda la Biblia". https://www.studylight.org/commentaries/spa/jfb/genesis-28.html. 1871-8.
Jamieson, Robert, D.D.; Fausset, A. R.; Brown, David. "Comentario sobre Genesis 28". "Comentario Crítico y Explicativo de toda la Biblia". https://www.studylight.org/
Whole Bible (27)Individual Books (3)
Versículos 1-22
LA SALIDA DE JACOB.
1. Isaac llamó a Jacob, y bendíjolo—Isaac se compenetró de los sentimientos de Rebeca, de modo que lo principal de su mensaje de despedida fué que evitara toda alianza matrimonial excepto con la rama de la familia en Mesopotamia. En aquella ocasión le dió una bendición solemne, pronunciada antes sin saberlo, mas ahora a propósito, y con espíritu cordial. También se la da más explícita y completa, y así Jacob fué reconocido como “el heredero de la promesa”
6-9. Y vió Esaú cómo Isaac había bendecido a Jacob—deseoso de agradar a sus padres, y si era posible, de hacer revocar el último testamento, se hizo prudente cuando era ya tarde (véase Mateo 25:10), y esperaba al agradar a sus padres en una cosa, expiar todas sus faltas anteriores. Pero sólo empeoró las cosas y aunque no se tomó “mujer de las hijas de Canaán”, se casó dentro de una familia que Dios había rechazado. Este acto mostró una reforma parcial pero nada de arrepentimiento, porque no dió pruebas de moderar sus propósitos vengativos contra su hermano, ni de alentar aquel espíritu piadoso que habría agradado a su padre. Era como Mica ( Jueces 17:13).
10. salió Jacob de Beer-seba, etc.—Su partida de la casa paterna fué una huída ignominiosa; y por temor de ser seguido o acechado por su vengativo hermano, no tomó el camino común, mas fué por sendas solitarias y poco frecuentadas, lo que aumentó la duración y los peligros de viaje.
11. encontró con un lugar—A marchas forzadas había llegado a Bethel, como a 77 kilómetros de Beer-seba, y tuvo que pasar la noche en campo abierto tomó de las piedras, etc.—“La naturaleza del suelo es una prueba existente sobre el relato del territorio pedregoso donde se acostó Jacob.” (Clarke’s Travels.)
12. soñó, y he aquí una escala—Algunos escritores opinan que no se quiere decir una escalera literal, porque es imposible concebir una imagen más extraña y más antinatural que la de una escalera, cuya base estuviera en la tierra, mientras que la cabeza llegase hasta el cielo, sin tener en qué apoyar su extremo superior. Ellos suponen que el pequeño montón de piedras sobre el cual descansó su cabeza en lugar de almohada, era el modelo en miniatura del objeto que apareció a su imaginación siendo el otro un montón gigantesco, montañoso, cuya ladera, endentada en la roca, daba la apariencia de una escalera. No hay duda de que este uso del término original era común entre los primeros hebreos; como Josefo, describiendo la ciudad de Ptolemáis (Acre), dice que estaba cercada por una montaña, la cual, por sus laderas sobresalientes, era llamada la “escalera”; y la vía que conducía a la ciudad desde arriba, se llamaba “escalera” (Nehemías 3), aunque eran unos escalones cortados en la roca. Pero sea que la imagen presentada a la mente de Jacob fuera la de una escalera común, o un montón montañoso como el descrito, el propósito de la visión fué el de dar consuelo, aliento y confianza al solitario fugitivo, tanto en sus circunstancias actuales como en sus perspectivas futuras. Sus pensamientos durante el día habrían sido dolorosos; acusándose a sí mismo de haber traído sobre sí el destierro y privaciones; y sobre todo, de que, aunque había recibido el perdón de su padre, tenía motivos para temer que Dios lo hubiera abandonado. La soledad da oportunidad para la meditación; y es ahora cuando Dios empieza a someterlo a un curso de enseñanza y preparación religiosas. Para disipar sus temores y calmar el tumulto interior de su mente, nada mejor que la visión de la escalera gigantesca, que se extendía desde él hasta el cielo, y sobre la cual los ángeles continuamente ascendían y descendían desde el lugar de Dios mismo con sus benévolos mensajes ( Juan 1:51).
13. Jehová estaba en lo alto de ella, el cual dijo—Para que no estuviera Jacob en duda en cuanto al significado de la visión, oyó él la voz divina; y el anuncio de su nombre, junto con la renovación del pacto, y una seguridad de la protección personal, produjeron en seguida en su mente un efecto de lo más solemne e inspirador.
16. despertó Jacob de su sueño—Su lenguaje y su conducta eran los de un hombre cuya mente estuviera llena del temor más solemne, de una piedad fervorosa, y de una viva gratitud a Dios (Jeremias 31:36).
18, 19. tomó la piedra.… y alzóla por título, etc.—El mero acto de alzar la piedra podría haber sido para señalar el lugar para el porvenir; y esta práctica todavía es común en Oriente, en memoria de algún voto religioso o compromiso. Pero el echar aceite en ella era un acto de consagración. Por consiguiente le dió un nombre nuevo, Beth-el, “casa de Dios” ( Oseas 12:4); y no parecerá cosa forzada o antinatural llamar casa a una piedra, cuando se considera la práctica común en países cálidos de sentarse al aire libre junto a una piedra, o sobre ella, como las de este lugar, “anchas extensiones de rocas desnudas, algunas de ellas verticales como los monumentos megalíticos de los druidas”. (Stanley.)
20-22. EL VOTO DE JACOB.
20. hizo Jacob vote—No hay que considerar que sus palabras indiquen una duda, y menos todavía que pongan condiciones o términos sobre los cuales él se dedicaría a Dios. Cámbiese el “si” en “puesto que”, y el lenguaje parecerá una expresión justa de la fe de Jacob, una evidencia de que él realmente había aceptado la promesa. ¡Qué edificante la meditación de Jacob en Beth-el!