11. el niño ministraba a Jehová delante del sacerdote EliâEstaba entregado a alguna ocupación adecuada a su tierna edad, tal como tocar los cÃmbalos u otros instrumentos de música; en prender las luces, y semejantes servicios fáciles e interesantes.
12-17. EL PECADO DE LOS HIJOS DE ELI.
12. los hijos de Eli eran hombres impÃosâHebreo, âhijos de Belialâ. No sólo descuidados e irreligiosos, sino hombres disolutos en sus acciones, viciosos y escandalosos en sus costumbres. Aunque profesionalmente ocupados en los deberes sagrados, no sólo eran extraños al poder de la religión en el corazón, sino que habÃan arrojado de sà el freno de la religión, y aun, como sucede en algunos casos con los hijos de ministros, llegaban al extremo de la corrupción desvergonzada.
32. verás competidor en el tabernáculoâRival afortunado porque el puesto de sumo sacerdote se levantarÃa de entre otra familia ( 2 Samuel 15:35; 1 Crónicas 24:3; 1 Crónicas 29:22). Pero la nota marginal âtú verás la aflicción del tabernáculoâ, parece que es una traducción preferible.
Declaración de derechos de autor Estos archivos son un derivado de una edición electrónica preparada a partir de texto escaneado por Woodside Bible Fellowship. Esta edición expandida del Comentario Jameison-Faussett-Brown está en el dominio público y puede ser utilizado y distribuido libremente.
Información bibliográfica Jamieson, Robert, D.D.; Fausset, A. R.; Brown, David. "Comentario sobre 1 Samuel 2". "Comentario CrÃtico y Explicativo de toda la Biblia". https://studylight.org/commentaries/spa/jfb/1-samuel-2.html. 1871-8.
VersÃculos 1-36
LA CANCION DE GRATITUD DE ANNA.
1. Anna oró, y dijoâLa alabanza y la oración están inseparablemente unidas en las Escrituras. ( Colosenses 4:2; 1 Timoteo 2:1). Este hermoso cántico fué su tributo de agradecimiento por la bondad divina en contestar su petición. Mi cuerno es ensalzado en JehováâEsto se refiere a una peculiaridad del vestido de las mujeres orientales de cerca del LÃbano, la cual parece haber existido antiguamente entre las mujeres israelitas, la de llevar una pequeña trompeta de estaño o de plata en la frente, de la cual se suspendÃa el velo. Las esposas sin hijos la llevaban sobresaliente a un ángulo oblicuo, mientras que aquellas que habÃan llegado a ser madres, en seguida la levantaban unos centÃmetros más hacia la lÃnea perpendicular, y por este cambio ligero pero notorio en su tocado, hacÃan saber, dondequiera que iban, el carácter maternal que ahora poseÃan.
5. cesaron los hambrientosâcesaron de sentir hambre. hasta parir siete la estérilâes decir, muchos hijos.
6. él hace descender al sepulcro, y hace subirâél reduce al estado más bajo de degradación y miseria; y restaura a prosperidad.
8. hace que tengan por heredad asiento de honraâque posean lugares de honor. levanta del polvo al pobre, y al menesteroso ensalza del estiércolâEl muladar, montón de excrementos de caballos, vacas o camellos, puesto al sol a secarse, para ser usado como combustible, que era, y todavÃa es, uno de los lugares más comunes donde se congregaban los limosneros más pobres; y el cambio hecho en la posición social de Anna, parecÃa a su agradecido corazón tan favorable y tan grande, como la elevación del pobre mendigo despreciado al puesto más alto y digno.
10. Jehová juzgará los términos de la tierra, y ensalzará el cuerno de su MesÃasâEste es el primer lugar en las Escrituras, donde aparece la palabra âungidoâ, o MesÃas, y como no habÃa rey en Israel en aquel entonces, parece que la mejor interpretación es que se referÃa a Cristo. Hay de veras una notable semejanza entre el cántico de Anna y el de MarÃa ( Lucas 1:46).
11. el niño ministraba a Jehová delante del sacerdote EliâEstaba entregado a alguna ocupación adecuada a su tierna edad, tal como tocar los cÃmbalos u otros instrumentos de música; en prender las luces, y semejantes servicios fáciles e interesantes.
12-17. EL PECADO DE LOS HIJOS DE ELI.
12. los hijos de Eli eran hombres impÃosâHebreo, âhijos de Belialâ. No sólo descuidados e irreligiosos, sino hombres disolutos en sus acciones, viciosos y escandalosos en sus costumbres. Aunque profesionalmente ocupados en los deberes sagrados, no sólo eran extraños al poder de la religión en el corazón, sino que habÃan arrojado de sà el freno de la religión, y aun, como sucede en algunos casos con los hijos de ministros, llegaban al extremo de la corrupción desvergonzada.
13. la costumbre de los sacerdotes con el pueblo eraâCuando alguien querÃa presentar un sacrificio de ofrenda pacÃfica, la ofrenda era traÃda en primera instancia al sacerdote, la parte para el Señor era quemada, y las partes asignadas a los sacerdotes y a los ofrendantes habÃan de ser hervidas. Pero los hijos de LevÃ, insatisfechos con el pecho y la espaldilla, los emolumentos señalados a ellos por la ley divina ( Ãxodo 29:27; LevÃtico 7:31), no sólo exigÃan parte de la porción del ofrendante, sino con rapacidad se apoderaban de ella antes de la ceremonia de levantarla o agitarla (véase LevÃtico 7:34); y además cometÃan la injusticia de levantar con su tenedor aquellas partes que ellos preferÃan, todavÃa crudas, para que fuesen luego asadas. La gente piadosa estaba indignada por sus intrusiones tan rapaces y profanas en los derechos del altar, como también en lo que habÃa de constituir la fiesta familiar y social del ofrendante. La verdad es que habiendo llegado a ser orgullosos, y no queriendo en muchos casos aceptar invitaciones a estas fiestas, exigÃan que les fuesen enviados obsequios de carne; y esto, siendo hecho primero como una cortesÃa, en el correr del tiempo, se estableció como un derecho, y dió origen a toda la agudeza rapaz de los hijos de Eli.
18-26. EL MINISTERIO DE SAMUEL.
18. el joven Samuel ministraba delante de JehováâEsta mención de sus primeros servicios en los patios exteriores del tabernáculo, fué hecha para preparar el camino para la interesante profecÃa tocante a la familia del sumo sacerdote. vestido de un ephod de linoâEspecie de vestido o delantal usado en los servicios sagrados por los sacerdotes inferiores y levitas, y también algunas veces por los jueces y otras personas eminentes; su uso fué permitido a Samuel, quien fué dedicado a Dios desde su nacimiento.
19. hacÃale su madre una túnica pequeña, y traÃasela cada añoâSabiendo que no podÃa él todavÃa rendir algún servicio útil al tabernáculo, ella se encargaba de proveerle su ropa. Tejer y hacer telas y trajes, antiguamente eran trabajos de las mujeres.
20. Eli bendijo a Elcana y a su mujerâEsta bendición, como la que pronunció anteriormente, tenÃa virtud profética, la cual apareció al poco tiempo en el aumento de la familia de Anna (v. 21), y la creciente capacidad de Samuel para el servicio del santuario.
22. las mujeres que velaban a la puerta del tabernáculoâEsta era una institución de mujeres santas de una orden estrictamente ascética, quienes renunciaban a todos los cuidados terrenales y se dedicaban al Señor, institución que perduró hasta el tiempo de Cristo ( Lucas 2:37). Eli era, en general, hombre bueno, pero no tuvo éxito en la educación moral y religiosa de su familia. Erró por su indulgencia paternal, y aunque los reprendÃa (véase Deuteronomio 21:18), sin embargo, por temor o indolencia, se sustraÃa de aplicarles restricciones o de someterlos a la disciplina que sus grandes delitos merecÃan. En su capacidad judicial, pasaba por alto sus actos públicos de mala administración, y permitÃa que ellos hiciesen intrusiones atrevidas en la constitución, por las cuales los daños más serios eran infligidos tanto a los derechos del pueblo como a las leyes de Dios.
25. no oyeron la voz de su padre, porque (deberÃa ser por lo tanto) Jehová los querÃa matarâNo fué la preor dinación, sino su propia desobediencia voluntariosa e impenitente, la causa de su destrucción.
27-35. UNA PROFECIA CONTRA LA CASA DE ELI.
27. vino un varón de Dios a Eli, y dÃjole ⦠que no haya viejo en tu casaâSe da tanta importancia en Oriente a la vejez, que se estimarÃa como una gran calamidad y sensiblemente menguarÃa la respetabilidad de cualquier familia el hecho de que no pudiera contar entre sus miembros a algunos ancianos. La predicción de este profeta fué ampliamente confirmada por las aflicciones, degradación, pobreza y muchas muertes prematuras con que la casa de Eli fué visitada después de este anuncio (Véase cap. 4:11; 14:3; 22:18-23; 1 Reyes 2:27).
31. cortaré tu brazo, y el brazo de la casa de tu padreâPor el retiro del sumo sacerdocio de Eleazar, el mayor de las dos hijos de Aarón, después que fueron destruÃdos Nadab y Abihu, se confirió aquella dignidad a la familia de Ithamar, a la cual pertenecÃa Eli, y ahora, puesto que sus descendientes habÃan perdido el derecho a este honor. el sacerdocio les serÃa quitado y restaurado a la rama más antigua.
32. verás competidor en el tabernáculoâRival afortunado porque el puesto de sumo sacerdote se levantarÃa de entre otra familia ( 2 Samuel 15:35; 1 Crónicas 24:3; 1 Crónicas 29:22). Pero la nota marginal âtú verás la aflicción del tabernáculoâ, parece que es una traducción preferible.