El miedo llenarÃa los corazones de NÃnive en el dÃa del ataque cuando observaron los escudos rojos del enemigo y sus uniformes carmesÃ. Los carros destellaban con metal mientras se hacÃan los preparativos para la batalla y los soldados invasores blandÃan sus largas lanzas de abeto; estaban listos para la batalla.
El Señor estaba contra NÃnive. En vÃvidos detalles, Dios describió el sitio y la captura de NÃnive. Cuando llegaban los enemigos, sus caballos cabriolaban y sus carros armados corrÃan como relámpagos. Corrieron de un lado a otro y se empujaron unos contra otros. El rey llamó a sus nobles a defender NÃnive. En su prisa, tropezaron unos con otros mientras intentaban en vano prepararse para defender la ciudad. Nahum incluso imaginó al invasor abriendo las compuertas de la presa en el rÃo Tigris e inundando la ciudad.
Nahum incluso vio el palacio arrasado. Asiria habÃa destruido muchas ciudades, palacios y templos, y ahora cosecharÃan lo que habÃan sembrado. Cuando se llevaron a NÃnive, sus mujeres hacÃan sonidos tristes y se golpeaban el pecho como palomas que arrullaban y aleteaban.
" ( Salmo 68:1 ) Se les dijo que guardaran las municiones o el equipo militar, vigilaran el camino, ceñiran sus lomos, juntaran todas sus fuerzas". HabÃan aplastado a otros y ahora les tocaba a ellos tener miedo. SerÃan retribuidos por su crueldad contra el pueblo de Dios. Los saqueadores habÃan despojado de todo al pueblo de Dios. Ahora Dios restauró la majestad de Jacob como la majestad de Israel. Dios dio a Judá la oportunidad de prosperar como nación nuevamente.
La inundación de la ciudad y la destrucción del palacio deben hacerles reconocer que Dios está contra ellos. HabÃan tomado botÃn de muchas naciones que habÃan saqueado en la batalla. Ahora su palacio, la ciudad y su nación serÃan destruidos. Huzzab like era una expresión figurativa para el lugar donde se encontraba el palacio. Aquellos que cuidaron del palacio serÃan llevados en luto y desesperación.
NÃnive fue saqueada &mdash Nahúm 2:8-10 : NÃnive es representada como un gran estanque de agua. Esto fue cierto debido a la gran cantidad de personas que estaban allÃ. El grito de la gente era "Stand, Stand!" En cambio, la gente huyó con miedo y desesperación. Toda esperanza se habÃa ido porque Dios estaba en contra de ellos. El grupo de personas se estaba vaciando.
Muchos hoy son tal como eran. Sienten que pueden ignorar a Dios y aun asà estar seguros y protegidos de cualquier castigo. La triste verdad es que muchos aprenderán demasiado tarde que debieron haber obedecido a Dios. La única manera de prepararse para el futuro es caminar con Dios.
HabÃa mucha riqueza en la ciudad de NÃnive. Los invasores saquearÃan y tomarÃan una gran cantidad de bienes. La única ventaja que la gente de NÃnive recibió de los invasores que se detuvieron para saquear la ciudad fue que más de ellos tuvieron tiempo de escapar con vida. "¡NÃnive está condenada! ¡Destruida! Su pueblo tiembla de miedo; sus rostros palidecen". NÃnive estaba vacÃa de habitantes y de todos sus tesoros. NÃnive habÃa destruido otras ciudades y ahora cosechan lo que han sembrado.
La destrucción de NÃnive será completa &mdash Nahúm 2:11-13 : Los lÃderes de NÃnive son comparados a leones. HabÃan sido muy salvajes en su trato con los demás. Muchas personas habÃan sido vÃctimas de su trato cruel. No habÃan mostrado misericordia y ahora no recibirÃan misericordia. Jesús dijo: "Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
" ( Mateo 5:7 ) Si no muestras misericordia, entonces no recibirás misericordia. Los dioses de la idolatrÃa no habÃan brindado ayuda a NÃnive. El esplendor, la riqueza, la gloria y el poder serÃan destruidos.
Información bibliográfica Box, Charles. "Comentario sobre Nahum 2". "Puntuaciones de Box sobre Libros Seleccionados de la Biblia". https://studylight.org/commentaries/spa/box/nahum-2.html. 2014.
Introducción
El Señor estaba contra NÃnive
Nahúm dos
Dios habÃa usado a NÃnive como Su vara para castigar a Su pueblo, Israel. Ahora envÃa una advertencia por medio de su profeta de que alguien vendrÃa a atacar y dispersar a NÃnive. ¡Ãl les dijo que (1) protegieran sus fortalezas! (2) ¡Cuidado con el camino! (3) ¡Sé valiente! Y para (4) ¡Prepararse para la batalla! ¡Qué fuerte profecÃa! Dios le dijo a NÃnive que usara todos los medios posibles de defensa; pero advirtió que todo serÃa en vano. El pueblo de Dios ha sido suficientemente castigado y ahora el Señor va a restaurar su poder y gloria.
El miedo llenarÃa los corazones de NÃnive en el dÃa del ataque cuando observaron los escudos rojos del enemigo y sus uniformes carmesÃ. Los carros destellaban con metal mientras se hacÃan los preparativos para la batalla y los soldados invasores blandÃan sus largas lanzas de abeto; estaban listos para la batalla.
El Señor estaba contra NÃnive. En vÃvidos detalles, Dios describió el sitio y la captura de NÃnive. Cuando llegaban los enemigos, sus caballos cabriolaban y sus carros armados corrÃan como relámpagos. Corrieron de un lado a otro y se empujaron unos contra otros. El rey llamó a sus nobles a defender NÃnive. En su prisa, tropezaron unos con otros mientras intentaban en vano prepararse para defender la ciudad. Nahum incluso imaginó al invasor abriendo las compuertas de la presa en el rÃo Tigris e inundando la ciudad.
Nahum incluso vio el palacio arrasado. Asiria habÃa destruido muchas ciudades, palacios y templos, y ahora cosecharÃan lo que habÃan sembrado. Cuando se llevaron a NÃnive, sus mujeres hacÃan sonidos tristes y se golpeaban el pecho como palomas que arrullaban y aleteaban.
La gente de NÃnive huirÃa mientras su ciudad se inundaba con agua y nadie se detendrÃa para defenderla. Los soldados invasores saquearÃan a NÃnive de su vasta riqueza. El ejército invasor vaciarÃa a NÃnive de sus tesoros y se convertirÃa en un desierto desolado. NÃnive serÃa como un lugar de alimentación de leones para los asirios. Los leones mataron solo lo que necesitaban para comer. Los asirios mataron simplemente porque eran crueles con sus enemigos. Nada podrÃa ser peor que el destino de NÃnive. El Dios Todopoderoso estaba en contra de ellos.
VersÃculos 1-4
La batalla se establece contra NÃnive &mdash Nahúm 2:1-4 : Esta horrible destrucción iba a venir contra NÃnive, la capital del Imperio Asirio. Se les animó a prepararse para lo que estaban a punto de enfrentar. Aquellos que habÃan dispersado a tantos otros ahora serÃan dispersados ââellos mismos. David escribió: âLevántese Dios, sean esparcidos sus enemigos; huyan también de su presencia los que lo aborrecen.
" ( Salmo 68:1 ) Se les dijo que guardaran las municiones o el equipo militar, vigilaran el camino, ceñiran sus lomos, juntaran todas sus fuerzas". HabÃan aplastado a otros y ahora les tocaba a ellos tener miedo. SerÃan retribuidos por su crueldad contra el pueblo de Dios. Los saqueadores habÃan despojado de todo al pueblo de Dios. Ahora Dios restauró la majestad de Jacob como la majestad de Israel. Dios dio a Judá la oportunidad de prosperar como nación nuevamente.
El ejército babilónico que invadirÃa Asiria era poderoso y fuerte. El rojo y escarlata hace referencia a la apariencia de sus implementos de guerra. El ejército era un espectáculo imponente. Los carros se movÃan con tal velocidad en las calles que las espadas que estaban unidas a las ruedas parecÃan antorchas encendidas. SerÃan tantos en número que chocarÃan entre sÃ. Los asirios vendrÃan agitando sus lanzas, listos para la batalla.
VersÃculos 5-7
La resistencia a la invasión es inútil &mdash Nahúm 2:5-7 : Los centinelas de NÃnive anunciarÃan al rey que el enemigo se acercaba. Se harÃan preparativos para la batalla, pero no servirÃan de nada. NÃnive tenÃa un ejército grande y fuerte, pero Dios estaba en contra de ellos. Los oficiales corren a defender las murallas, pero en su prisa tropiezan con sus armaduras.
Una vez que llegan a la pared se prepara una defensa. Sin embargo, todos sus esfuerzos fueron en vano. El ejército invasor abrió las puertas del rÃo e inundó la ciudad para entrar y destruir la ciudad y el palacio.
La inundación de la ciudad y la destrucción del palacio deben hacerles reconocer que Dios está contra ellos. HabÃan tomado botÃn de muchas naciones que habÃan saqueado en la batalla. Ahora su palacio, la ciudad y su nación serÃan destruidos. Huzzab like era una expresión figurativa para el lugar donde se encontraba el palacio. Aquellos que cuidaron del palacio serÃan llevados en luto y desesperación.
VersÃculos 8-10
NÃnive fue saqueada &mdash Nahúm 2:8-10 : NÃnive es representada como un gran estanque de agua. Esto fue cierto debido a la gran cantidad de personas que estaban allÃ. El grito de la gente era "Stand, Stand!" En cambio, la gente huyó con miedo y desesperación. Toda esperanza se habÃa ido porque Dios estaba en contra de ellos. El grupo de personas se estaba vaciando.
Muchos hoy son tal como eran. Sienten que pueden ignorar a Dios y aun asà estar seguros y protegidos de cualquier castigo. La triste verdad es que muchos aprenderán demasiado tarde que debieron haber obedecido a Dios. La única manera de prepararse para el futuro es caminar con Dios.
HabÃa mucha riqueza en la ciudad de NÃnive. Los invasores saquearÃan y tomarÃan una gran cantidad de bienes. La única ventaja que la gente de NÃnive recibió de los invasores que se detuvieron para saquear la ciudad fue que más de ellos tuvieron tiempo de escapar con vida. "¡NÃnive está condenada! ¡Destruida! Su pueblo tiembla de miedo; sus rostros palidecen". NÃnive estaba vacÃa de habitantes y de todos sus tesoros. NÃnive habÃa destruido otras ciudades y ahora cosechan lo que han sembrado.
VersÃculos 11-13
La destrucción de NÃnive será completa &mdash Nahúm 2:11-13 : Los lÃderes de NÃnive son comparados a leones. HabÃan sido muy salvajes en su trato con los demás. Muchas personas habÃan sido vÃctimas de su trato cruel. No habÃan mostrado misericordia y ahora no recibirÃan misericordia. Jesús dijo: "Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
" ( Mateo 5:7 ) Si no muestras misericordia, entonces no recibirás misericordia. Los dioses de la idolatrÃa no habÃan brindado ayuda a NÃnive. El esplendor, la riqueza, la gloria y el poder serÃan destruidos.
El Todopoderoso dijo a NÃnive: He aquÃ, yo estoy contra ti, dice Jehová de los ejércitos, y quemaré sus carros en el humo, y la espada devorará tus leoncillos, y cortaré tu presa de la tierra, y la voz de tus mensajeros no se oirá más". ( Nahúm 2:13 ) La gente habÃa atravesado las puertas de NÃnive durante siglos para destruir a otros.
Ahora todos esos mensajeros están muertos. No hay nadie para salir por la puerta. Literalmente, lo que un hombre siembra, eso cosechará. "No os engañéis; Dios no puede ser burlado; porque todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el EspÃritu, del EspÃritu segará vida eterna ." ( Gálatas 6:7-8 )